*Los amantes del buceo tendrán un nuevo atractivo turístico
Acapulco, Guerrero.-Para restaurar el ecosistema de coral y hacerlo un atractivo turístico para los amantes del buceo, el biólogo y buzo Juan Manuel Barnard Ávila y una cooperativa de pescadores crearán un jardín artificial de arrecife de coral en la Isla de la Roqueta.
El también fotógrafo submarino dijo que este proyecto es de manera sustentable y en él se utilizarán cuadros hechos con fajillas de madera de 30 y 40 centímetros y un material especial para incrustar las pequeñas ramificaciones de coral que fueron encontrados rotos.
También se utilizará material pet, donde botes de plástico se llenarán de cemento y varilla para colocarse cerca de la zona rocosa y se cubra alrededor de 10 metros cuadrados de arrecife artificial de coral.
El experto comentó que se empezará a trabajar bajo un estudio de factibilidad de manera conjunta con pescadores, que están preocupados por los efectos del calentamiento global y la disminución y extinción de productos del mar y que explotaron durante décadas.
“Este jardín puede estar en dos semanas, la primera semana será de estudiar la zona y buscar el sitio y después viene la colecta, la incursión y fijación donde queremos repoblar esta zona de corales en la Isla de la Roqueta”, comentó.
El biólogo e instructor de buceo consideró que este proyecto sería un acto sin precedente en Acapulco, ya que sólo con el apoyo de un empresario y una sociedad cooperativa pesquera se iniciarán la restauración del ecosistema. Dijo que el Jardín artificial de coral que se implementará será con recursos propios.
“Estamos con las cooperativas pesqueras iniciar una restauración del
ecosistema de manera altruista, para captar el turismo y que beneficiará a los pescadores”.
También participarán los operadores de buceo quienes mantendrán la vigilancia.
En el proyecto también se incluirán estudiantes de ciencias marinas del municipio, quienes iniciarán con un breve diagnóstico de búsqueda de zona para replantar el coral en la Isla de la Roqueta y con base en experiencias exitosas desarrolladas en otros sitios del litoral de Guerrero.
Barnard Ávila comentó que la Isla de la Roqueta es el lugar ideal para realizar el Jardín artificial de Coral debido a la oxigenación que tiene el agua porque está en el canal de boca chica y el flujo del mar ayuda mucho a la replantación de arrecifes.
El biólogo informó que este proyecto ayudará a sobrepoblar esa zona de la Isla de la Roqueta y beneficiará como un atractivo turístico de exploración.
“Con un arrecife artificial, nosotros promovemos la captura del bióxido de carbono CO2, conocido como GEI, gases efecto invernadero que está causando el principal problema del calentamiento global y estamos buscando una solución al problema y estos arrecifes artificiales se ha comprobado que ayuda a mitigar este proceso”, enfatizó.
“Vamos a sembrar coral, yo ya he hecho este tipo de trabajo y ha sido de manera exitosa y ahora queremos hacerlo en Acapulco para también crear las zonas de reserva biológica para que no sean tocadas y no sean explotadas”, aseveró.
El biólogo lamentó que no todos los pescadores de las cooperativas pesqueras que existen se han dado cuenta de que los productos que sacaban del mar para mantener a sus familias ha disminuido y tiene que buscar otra diversificación para vivir.
Explicó que la zona donde se sembrará el coral artificial, es en la Isla de la Roqueta, que es una zona que está en proceso de ser declarada una zona de reserva natural por organismo ambientalistas no gubernamentales.
El biólogo dio a conocer que hay coral blando y duro en las zonas rocosas y en los acantilados desde la zona turística de Pie de la Cuesta hasta playa Revolcadero.
“Se pueden encontrar pequeñas manchas de coral a una profundidad no mayor de 10 metros, por lo general en el caso de los arrecifes de los corales duros; pero todo lo que le llamamos arbolitos de coral pueden encontrarlos a 40 a 50 metros y hay otro tipo de corales que su extracto son a 14 metros”, explicó.
Hace 8 años, Barnard Ávila también realizó un proyecto de arrecifes artificiales de coral, donde con el apoyo de las autoridades gubernamentales, se construyeron bases de concreto y fueron colocados en el fondo del mar de la Isla de la Roqueta, Corsario, Petatlán cerca de Barra de Potosí, en la Isla de Ixtapa y playa Ventura.
“Con estos arrecifes artificiales estamos ayudando a mitigar el cambio climático y el calentamiento global”, consideró.
Dio a conocer que la colocación de bases de concreto en el fondo del mar, inició primero con la idea de empezar un estudio de investigación para el desarrollo de cadenas alimenticias y generar más biomasa y capturar carbón bajo el mar por medio de los arrecifes artificiales.
Barnard Ávila explicó que una vez que se colocaron las bases de cemento en el fondo del mar, de inmediato empezaron a “cubrirse de vida marina” y en un año se convirtieran en un arrecife artificial.
Comentó que para los instructores de buceo, los arrecifes artificiales de coral ha sido un atractivo turístico en estos sitios donde hace 8 años se colocaron túneles de concreto.
Explicó que una vez que el turista se mete a bucear puede pasar por túneles pequeños pero puede apreciar la gran cantidad de vida marina que está en área ecológica y se convertido en un sitio obligado para bucear.
“Hemos llevado a miles de turistas que se van con un muy buen sabor de boca y sobre todo los operadores de buceo les dicen de qué se trata y qué finalidad tiene y es algo que sirve para Acapulco (los arrecifes artificiales de coral), estamos hablando de una manera sustentable de lo que es Acapulco desde el otro punto de vista”, precisó.
Mencionó que casi seis mil personas al año arriban al puerto a bucear y son llevados por instructores de buceo certificados a diferentes puntos de la bahía a conocer la vida marina y los arrecifes artificiales de coral.
En ese sentido, consideró que las autoridades de turismo deberían de analizar, fomentar y recomendar el buceo en este puerto, que fue el pionero en esta actividad.
El buzo explicó que hay diferentes tipos de corales blandos y duros, pero en las bahías de Acapulco nunca ha sido alta la abundancia.
También, advirtió, que por el calentamiento del mar, debido al fenómeno de El Niño el coral está sufriendo un estrés y está teniendo un blanqueamiento.
Recordó que en el siglo pasado hubo un saqueo de coral ripio y fue utilizado para recuerdos, artesanías y colocar en los aparadores de las joyerías.
El biólogo Barnard Ávila informó que el coral blando son los más resistentes en el cambio climático y están cambiando a un color blanco.
Mientras que el coral duro son los más sensibles a los cambios de temperatura y también están cambiando a un color blanco o están muriendo por el calentamiento global.
