La Junta de Castilla y León, por boca de su consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha pedido hoy por primera vez de manera abierta que el Gobierno central se encargue de controlar la movilidad de habitantes de la autonomía de Madrid para evitar “diseminaciones” hacia las diferentes provincias de la Comunidad, como ocurrió también hacia León en la primera ola de coronavirus desde el mes de marzo, provocando no pocos contagios.
Así lo ha expresado en una entrevista realizada por el programa de Las Mañanas de RNE que se puede escuchar íntegra bajo estas líneas. Allí, Casado certificó que la Junta ha realizado esa petición al ministro de Transportes, José Luis Ábalos.
“El tema de la movilidad nos preocupa mucho. En la primera ola se cerraron colegios y universidades en Madrid, pero no se cerró la movilidad y hubo una diseminación importante. Los puntos de entrada y de salida son a veces los más peligrosos a la hora de producirse los contagios”, aseguró. Se refirió al “control de la movilidad, no tango quitarla o restringirla, sino controlar las distancias de seguridad, las mascarillas, la higiene, evitar las aglomeraciones en las entradas y salidas, porque muchas veces son los puntos más peligrosos para producirse los contagios”.
Admitió Casado que “nos puede preocupar (la evolución) en País Vasco, en La Rioja… en todas las que nos rodean, incluso en las buenas, que tengan buenos datos, como puede ser Asturias; y qué pasa en Madrid nos puede preocupar”. Pero defendió las decisiones que “nosotros tomamos en el marco del Consejo Interterritorial es el marco” y que entiende que “limitan los contagios”.
Casado rechaza, sin embargo, pedir una nueva aplicación del estado de alarma para restringir la movilidad y considera clave ir de la mano de los expertos, que en estos momentos aconsejan confinamientos locales y cuarentenas más cortas y efectivas, como las que se han producido ya en algunos núcleos de la Comunidad.
Aquí se pueden escuchar sus declaraciones:
