Una joven azafata decidió confesarse y revelar lo que, para ella y para sus compañeras, suelen ser los comportamientos más reprochables de los viajeros en avión.
Caroline Skahn, como se identificó la mujer en el portal multinacional ‘Insider’, ha creado un profundo debate sobre cómo deberían ser los pasajeros de un vuelo excellent.
Sin ánimo de juzgar a nadie, aquí le presentamos las 10 actitudes que más exasperan a las auxiliares de los aeroplanos.
Si usted práctica alguna debería considerarlo pues podría ser digno de un caso de ‘alto riesgo en las alturas’.
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1. No saludar
Aunque parezca algo básico, hay personas que no saludan a las personas que los reciben en las puertas de embarque.
“Apreciamos mucho cuando nos saludan. Se sorprenderían si supieran cuántas personas suben a bordo y ni siquiera hacen contacto visual con nosotros, pero aún así, minutos después, intentarán entregarnos su basura en su camino sin decir ni una palabra”, asegura Caroline.
La joven explicó que si los asistentes de vuelo son capaces de decir ‘Buenos días’ a 200 personas los pasajeros deberían poder hacerlo, al menos, con una.
2. Quitarse los zapatos
La costumbre de descalzarse para ir en comodidad durante el viaje parece que no cae muy bien en el seno de los tripulantes.
Según Skahn, hay dos razones fundamentales para dejar de hacerlo: “es asqueroso y tus vecinos de silla probablemente no adoran oler pies”.
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3. Que pidan una cobija cuando no la necesitan
Lo cube la azafata: es cierto que los aviones no cuentan con abundancia de mantas térmicas.
Ella insta a las personas ‘friolentas’ a que vayan muy bien abrigadas o lleven sus propias cobijas en la maleta de mano.
4. Que se quieran quitar el tapabocas
En tiempos en que la pandemia sigue siendo un gran flagelo a nivel mundial, resulta desgastante para las auxiliares de vuelo que algunos pasajeros insistan en retirarse el tapabocas.
En un espacio cerrado y estrecho resulta toda una contravención retirar una de las principales medidas contra el coronavirus.
“Las reglas son claras”, cube Caroline.
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5. Que despierten a los pasajeros dormidos
Si bien podría verse como un acto de caballerosidad, despertar al vecino de puesto puede ser engorroso.
“Si tu vecino es un extraño y está durmiendo, no lo despiertes. Te juro que no tiene tantas ganas de comer comida de avión”, considera Caroline. Además, agrega que en el caso de que se despierte y desee algo, puede “usar el timbre” para solicitarlo.
6. Que les pregunten ‘dónde va el avión’
La curiosidad innata lleva a muchos viajeros a querer saber de qué país son las nubes que ven por la ventana. De ahí que acostumbren preguntarle eso a las azafatas.
Sin embargo, tal cual cube una de ellas, “la mayoría de nosotros no tiene una ruta establecida, así que lo más probable es que no tengamos idea sobre qué estamos volando”.
7. Que usen la cocina de gimnasio
Es muy común que, durante los vuelos, los pasajeros deseen un momento para ‘estirar las piernas’ y desperezarse.
El lugar predilecto por muchos es la cocina o las áreas delanteras o traseras de un avión, que son los lugares donde están los carritos de comida y donde se sienta la tripulación.
Eso ‘saca de quicio’ a las azafatas.
“No solo es frustrante, sino que además es una regla del ente regulador de aviación: no podemos tener pasajeros aglomerados en esas áreas”, sostiene Caroline.
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8. Que se enojen sin explicación
Ante cualquier falla en el servicio, muchos de los viajeros suelen descargarse contra los asistentes de vuelo.
Algunos, incluso, llegan a pasarse de la raya. Eso, para las azafatas y otros tripulantes, es inaceptable.
“Entiendo que muchas veces la gente solo necesita alguien con quien desahogarse, pero hay que entender que solo somos empleados, que hacemos todo lo posible para hacer nuestro trabajo. Algunas veces, lo mejor que puedo hacer es dirigirlo a un número de servicio al cliente para que llame después de aterrizar”, cube.
9. Que las toquen
Aunque sea tradición tomar a alguien del brazo para llamar su atención, en un vuelo puede resultar reprochable.
“No sé por qué la gente piensa que empujar o agarrar a alguien está bien en un avión”, se pregunta Caroline en su texto.
A ratos se les olvida a algunos pasajeros que existe un botón de llamada diseñado exclusivamente para atender sus solicitudes.
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10. Que las llamen para botar basura
Y, si bien los usuarios de cualquier aerolínea pueden hacer uso del timbre para llamar a las azafatas, la thought es que se utilice en casos que lo ameriten.
Tirar la basura no parece ser uno de ellos.
“Probablemente hayamos pasado por ahí antes, pero cuando tocan el timbre no tenemos guantes o una bolsa de basura con nosotros”, sostiene Caroline, quien sugiere que los viajantes utilicen la bolsa de ‘vómito’ como depósito de basura private durante todo el trayecto y que apenas termine el vuelo se la entreguen a la tripulación.
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