Un estudio publicado por la Coalición Mundial para el Envejecimiento ha dado a conocer que viajar es una de las mejores maneras de prevenir el alzhéimer y prevenir también la aparición de otras enfermedades cerebrales.
De acuerdo a una encuesta realizada a 1,500 estadounidenses, se encontró que una de las motivaciones para viajar es el hecho de la estimulación psychological causada por la planificación y tomar vacaciones se percibía como un agente que puede prevenir esta patología relacionada con el olvido.
De acuerdo a la doctora Miriam Jiménez, directora médica de Biogen México, el acto de planear un viaje, desde revisar las opciones de destino, los métodos de viaje, la interacción con gente nueva, comunicarse con otra persona que hable un idioma diferente al nuestro, si es el caso, y hasta el regreso, ya con historias por contar a nuestros cercanos, es un proceso en el que la mente se activa y que resulta benéfico, ya que, se ha demostrado que quienes continuamente están “desafiando” a su cerebro, exponiéndolo a nuevos retos o complejas tareas de aprendizaje parecen tener un cerebro más sano y presentan menor probabilidad de desarrollar demencia.
Otras investigaciones han demostrado que cuando el cerebro está sano podrá desarrollar nuevas conexiones entre las neuronas, incluso en edad avanzada. Finalmente, nuestro cerebro es un ente que gusta de estar aprendiendo de manera constante, cualquier traslado de un punto monótono hacia algo nuevo, será bien recibido por este.
Los viajes crean nuevas conexiones cerebrales
Algo que refuerza la Sociedad Española de Neurología, quien afirma que las “neuronas pueden generar nuevas conexiones, pero es clave entrenar y estimular el cerebro. Y ello se hace con tres elementos: enfrentar a nuestro cerebro a la novedad, la variedad y el desafío. Viajar cumple con los tres”.
Cuando viajamos, la novedad se presenta en el propio acto, al salir de la rutina; la variedad la podemos encontrar en la gastronomía, en el momento en que degustamos un platillo diferente al que estamos acostumbrados, puede ser una experiencia sensorial altamente estimulante y el desafío podemos encontrarlo cuando, estando en un lugar desconocido salimos para dar una vuelta y nos proponemos regresar caminando y recordar la ruta para llegar a donde nos hospedamos.
La música también ayuda contra el alzhéimer
La música puede ser otro aspecto que puede detonar la actividad de nuestra mente. Si escuchamos música de marimba, seguro recordaremos algún viaje que hicimos al sur de nuestro país: Tabasco, Campeche o Yucatán. Mientras que, si percibimos una bossa nova clásica, seguro remitiremos nuestra mente a un viaje por Brasil.
Alzheimer, padecimiento cercano
Aterrizando el panorama de esta dolencia a México, el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía estima que más de 350 mil personas tienen Alzheimer en el país.
Esta alteración en la mente afecta las células del cerebro (neuronas), provocando que se degeneren y mueran. Quienes la padecen presentan un deterioro progresivo en la capacidad para procesar el pensamiento.
El síntoma más representativo es el desgaste continuo de las funciones mentales como: pérdida de la memoria, problemas para articular el lenguaje (olvido de palabras), problemas para reconocer objetos, desorientación en tiempo y espacio (olvido de fechas y lugares), por mencionar algunos
La enfermedad de Alzheimer no hace distinción de clase socioeconómica, raza ni grupo étnico, afecta por igual a hombres y mujeres, aunque más frecuentemente a personas de edad avanzada, aproximadamente un 10 % en mayores de 65 años y un 47 % en personas de 85 años, aunque también puede presentarse en personas jóvenes (35-50 años).
Pese a que esta afección es incurable, existen tratamientos eficaces modificadores de este desorden, como terapias para retrasar la progresión de los síntomas.
Leer más: Cofepris alerta de cinco “productos engaño” que son riesgo para la salud
” Fuentes www.debate.com.mx ”