Este martes visitamos la provincia de Córdoba en la sección de viajes. Precisamente, en la capital cordobesa, el mes de mayo se conoce como el “Mayo Cordobés”, por los numerosos festejos que tienen lugar como la Fiesta de los Patios o su Feria, que se celebra en la tercera semana del mes.
Pero en esta ocasión, nos desplazamos a una localidad próxima, a un poco más de veinte kilómetros de la capital cordobesa: Almodóvar del Río. Allí, en lo alto de una colina y junto al río Guadalquivir encontramos el Castillo de la Floresta, también llamado el Castillo de Almodóvar del Río.
Se trata de una fortificación de origen árabe, construida en torno al 740. Vinculado en siglo X al Califato de Córdoba, y que siglos después, durante la reconquista, pasaría a manos Fernando III “El Santo”. Es una fortaleza que han dejado huella en numerosas culturas y que ha sido testigo de numerosos acontecimientos históricos.
Pero con el paso del tiempo, llegó un momento en el que el edificio cayó en desuso y acabó en la completa ruina. Hasta el siglo XIX, cuando el duodécimo conde de Torralva, Rafael Desmaissieres y Farina y arquitecto Adolfo Fernández Casanova comenzaron con su reconstrucción.
Las obras iniciaron en el año 1901 y cien años después, en 2001, el Castillo de Almodóvar abrió sus puertas. Desde entonces, cientos de visitantes han paseado por su patio de armas, sus mazmorras o su Torre del Homenaje. Incluso forma parte del fenómeno de la serie de Juego de Tronos, ya que allí se rodó varias escenas del Reino de Altojardín, hogar de la Casa Tyrell.
Rocío Aceña, directora del castillo, nos ha desgranado hoy la historia de esta fortaleza, abierta durante todo el año, con sus diferentes iniciativas y actividades culturales.
” Fuentes esradio.libertaddigital.com ”