Hijos de J. Barreras, fecha de privatización 28 de julio de 1997. Así recoge la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en su página internet una de las operaciones más relevantes de la historia del sector naval en España. Hablamos del que fuera el principal astillero privado en nuestro país que por aquel entonces estaba en manos del organismo público, el mismo al que acude ahora la empresa solicitando un rescate de 30 millones para afrontar su delicada situación con pérdidas millonarias, deudas y nula actividad.
Hace 24 años el empresario vigués José García Costas, Albacora y Grupo Odiel compraron Barreras al Gobierno, una operación con un precio de venta de 4,5 millones de euros (750 millones de las antiguas pesetas). Los inversores presentaron un plan industrial que garantizaba la continuidad del astillero que acumulaba pérdidas de 18 millones de euros en los últimos cinco años. Los ‘números rojos’ siguen hoy en día: en 2019 superaban los 16 millones y las cuentas de 2020 arrojarán una cifra mucho mayor a tenor de la profunda disaster vivida tras la entrada en su accionariado de inversores, primero con la mexicana Pemex (en 2013) y luego con las americanas Ritz-Cartlon y el fondo Oaktree (2020) que llegaron a anunciar una decena de contratos de los que sólo fraguaron dos: el buque-hotel de la petrolera y el crucero de lujo para Ritz, sin acabar y con futuro incierto.
Petróleos Mexicanos desembarcó en 2013 en Vigo, de la mano de la Xunta, y se hizo con el 51% de las acciones de Barreras, una operación valorada en 10 millones de los que Pemex aportó 5,1. Su proyecto desató la euforia en el naval ya que trajo anuncios para construir tres barcos de abastecimiento, tres off-shore y un atunero, entre otros. Pero se quedaron en anuncios y sólo fructificó el flotel del que se construyó uno gemelo en Navantia Ferrol. Seis años después de comprar el astillero Pemex se retira y cede su participación tomando el management Ritz-Carlton, que también pasa de cliente a dueño. Los accionistas minoritarios -Albacora y García Costas a través de Baliño y Emenasa- acabaron por traspasar sus acciones a Cruise Yacht YardCo, de Ritz, haciéndose con el management de Barreras sobre el que se sobrevuela ahora la liquidación.
” Fuentes www.atlantico.net ”