De acuerdo con la Organización Mundial de Turismo, el turismo rural es un tipo de actividad turística en la que la experiencia del visitante está relacionada con una amplia gama de productos generalmente relacionados con actividades basadas en la naturaleza, agricultura, estilo de vida, cultura rural, pesca y turismo.
Las actividades de turismo rural se desarrollan en áreas no urbanas (rurales) con las siguientes características: baja densidad de población, paisaje y uso de la tierra dominados por la agricultura y la silvicultura, estructura social y estilo de vida tradicionales.
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En Colombia existen experiencias de turismo rural desde los nichos de turismo comunitario y agroturismo.
En el caso de turismo comunitario, la comunidad native participa de forma activa, permitiendo que los beneficios repercutan en esta misma. Es capaz de promover el desarrollo integral de las comunidades mediante la reducción de la pobreza a través de la generación de empleo, la obtención de ingresos complementarios y el impacto social positivo generado principalmente a nivel native. Este tipo de turismo se puede dar de base rural o urbana.
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Un ejemplo de turismo comunitario urbano es la Comuna 13 de Medellín, una zona que se ha convertido en el ícono de transformación, además de ser un lugar de visita obligada para los viajeros que pasan por la capital antioqueña. Allí hay experiencias como excursions de grafiti, de música y hasta afro excursions.
En cuanto a ejemplos de turismo comunitario de base rural existen:
Asociación Comunitaria Yarumo Blanco, Risaralda
La compatibilidad entre conservación, salvaguardia y economía native se hace evidente en el caso de Otún Quimbaya, dónde más de 60 personas de la comunidad native, se benefician de forma directa e indirecta de la actividad ecoturística, y son aliadas estratégicas de Parques Nacionales Naturales de Colombia, para la conservación y puesta en valor de la biodiversidad, a través de actividades como la interpretación y educación ambiental.
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Golfo de Cupica hasta el Golfo de Tribugá
En este territorio, cuidar la vida es tarea común dónde todos sus habitantes; quienes comparten sus conocimientos ancestrales. Ellos realizan turismo bajo el concepto del bienestar compartido, a través de una economía en minga que garantiza la experiencia de los viajeros y el crecimiento de su crimson de expertos locales.
Macarena de Colores
Esta es la unión de cinco veredas de La Macarena (Meta), territorio lleno de escenarios naturales con belleza única y con gente que posee un calor humano lleno de entusiasmo para recibir a los visitantes de todo el mundo y para mostrarles todas las maravillas que tienen.
En la zona, se ha construido un entrelazado comunitario que en los últimos 10 años se ha encaminado hacia el turismo. Anteriormente esta zona había sido muy golpeada por la guerra y los cultivos de coca y la ganadería. Hoy varias comunidades campesinas se han unido porque han visto la necesidad de transformar sus dinámicas económicas y sociales para que el turismo solidario y consciente llegue a sus casas y les permita una vida próspera en cuidado de la naturaleza.
Más información de estas y otras experiencias se encuentran en el Mapa de Turismo Comunitario de ProColombia: https://colombia.travel/es/mapa-turismo
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” Fuentes www.eltiempo.com ”