¿Has pensado alguna vez en reducir tus gastos en alimentación sin sacrificar la calidad de tu dieta? Según un estudio reciente publicado en The Conversation, seguir las pautas dietéticas recomendadas podría ayudarte a ahorrar hasta 160 dólares cada quince días.
Para los amantes de los viajes, el ahorro en la comida es una excelente noticia, ya que significa que tendrán más dinero para destinar a explorar nuevos destinos turísticos. Imagina poder disfrutar de esa cena especial en un restaurante con estrella Michelin o reservar un día de excursión a un parque nacional.
Entonces, ¿cómo puedes aplicar esta información a tus próximas vacaciones? Aquí tienes algunas ideas para disfrutar de una alimentación saludable y económica mientras viajas:
1. Opta por la cocina local: En lugar de frecuentar cadenas de restaurantes internacionales, pruébate a ti mismo sumergiéndote en la cultura local y disfrutando de la deliciosa comida típica del destino que estás visitando. No solo ahorrarás dinero, sino que también tendrás la oportunidad de experimentar sabores auténticos y únicos.
2. Visita mercados locales: Muchos destinos turísticos tienen mercados al aire libre donde los lugareños venden productos frescos, pan recién horneado y otros alimentos deliciosos a precios mucho más bajos que los supermercados. Vale la pena dar un paseo por estos mercados y abastecerse de ingredientes para preparar tus propias comidas.
3. Haz picnic: Una forma económica y encantadora de disfrutar de la comida mientras viajas es organizar un picnic en un parque, en la playa o en cualquier otro lugar pintoresco que te llame la atención. Prepara tus propios sándwiches, ensaladas frescas y frutas, y disfruta de una comida al aire libre bajo el sol.
En resumen, al aplicar los consejos dietéticos para ahorrar dinero en comida durante tus viajes, no solo estarás cuidando tu bolsillo, sino que también tendrás la oportunidad de disfrutar de sabores auténticos y experiencias gastronómicas únicas en cada lugar que visites. ¡Buen provecho y buen viaje!
” Sources theconversation.com ”