Ucrania ha denunciado ataques aéreos rusos «sin precedentes» contra la capital y otras ciudades en la mañana de este jueves, un día después de alcanzar un acuerdo con Moscú para extender el pacto que le permite exportar grano por el Mar Negro.
«Continúa la serie de ataques aéreos contra Kiev, sin precedentes por su potencia, intensidad y variedad», ha declarado Sergi Popko, jefe de la administración civil y militar de Kiev.
No se han registrado víctimas, agregó Popko.
En cambio, en la ciudad portuaria de Odesa, una persona murió y otras dos resultaron heridas cuando un misil impactó en una infraestructura industrial, según las fuerzas armadas.
El ejército ucraniano reportó varias explosiones en el distrito Desnyansky, de Kiev, y un incendio en un comercio del barrio capitalino de Karnytskyi.
Misiles de crucero contra el centro
El ejército informó de ataques con «misiles de crucero» en la región de Vinnytsia, en el centro del país, y medios de prensa reportaron explosiones en Khmelnytskyi, unos 100 km más al oeste.
La defensa antiaérea de la capital está activa y la población debe permanecer en los refugios, advirtió Popko.
China y Turquía, mediadores
Un día antes, Rusia y Ucrania acordaron extender su acuerdo para la exportación de cereal ucraniano, un raro ejemplo de cooperación en medio del conflicto.
Sin embargo, surgieron dudas sobre su viabilidad tras los ataques rusos del jueves contra Kiev y otras ciudades.
El acuerdo granero fructificó tras la reunión entre el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores con un enviado de China, ante el cual insistió en que Kiev no aceptaría un plan de paz que implique ceder territorio.
China, un estrecho aliado de Moscú, nunca ha condenado públicamente la invasión rusa, y su enviado Li Hui busca promover negociaciones encabezadas por Pekín para resolver el conflicto.
El ministro ucraniano, Dmytro Kuleba, expuso al enviado chino «los principios para el restablecimiento de una paz duradera y justa, fundada en el respeto de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania», señaló un comunicado ministerial.
Kiev ha recibido abundantes armas occidentales desde el inicio del conflicto, incluidos sistemas de misiles Patriot para resguardarse de los ataques aéreos rusos contra civiles e infraestructuras.
La defensa aérea ucraniana ha sido clave en proteger al país de los bombardeos e impedir a las fuerzas de Moscú tomar control aéreo del conflicto.
Pero Rusia, tras sufrir reveses en el terreno, comenzó a lanzar ataques aéreos que han dejado a millones de personas sin electricidad, agua y calefacción.
El acuerdo granero fue anunciado por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, quien medió en el entendimiento para extender por dos meses la exportaciones de granos desde dos puertos ucranianos sin que Rusia lo bloquee.
«Estos acuerdos son importantes para la seguridad alimentaria mundial; productos ucranianos y rusos alimentan al mundo», afirmó el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
Acuerdo granero, en peligro
Rusia ha amenazado con retirarse del acuerdo, y el miércoles insistió en que presenta «disparidades» en su aplicación.
Kiev ha acusado a Rusia de continuar bloqueando sus barcos al negarse a registrarlos y realizar prolongadas inspecciones.
La lucha por Bajmut, continúa
En el frente, continuan los combates por el control de la ciudad oriental de Bajmut.
Ucrania busca recuperar territorios ocupados por las fuerzas rusas tras la invasión de febrero de 2022, y áreas tomadas por Rusia en 2014.
La batalla por Bajmut se ha convertido en la más prolongada de la guerra. Ucrania asegura que ha avanzado en la zona, recuperando posiciones rusas en los suburbios.
” Fuentes www.abc.es ”