La ITB de Berlín, la mayor feria de viajes del mundo, regresa tras tres años de crisis sanitaria. Hasta el jueves habrá unos 10.000 expositores y se espera a unos 160.000 visitantes -en su mayoría profesionales-, decididos a hacer negocios y pasar página a una disaster que ha sacudido el mercado turístico.
“El sector de los viajes ha demostrado ser resistente y adaptable. Vemos que ya está aumentando, que las reservas están creciendo mucho, sobre todo las salidas. Vemos también un aumento de los viajes internacionales y nacionales. Sin embargo, la sostenibilidad es uno de los temas principales en este campo”, explica la directora de la feria, Deborah Rothe.
Con muchos viajeros deseosos de reducir el impacto climático de sus viajes, “Open for change” es el lema del salón de este año. Entre las tendencias, la tecnología, por supuesto, y los medios de transporte menos emisores, como el tren.
Björn Bender, es presidente y CEO de Rail Europe: “El sector ferroviario en Europa se ha recuperado muy bien. Si comparamos las cifras de 2022 con las de 2019, ya está casi un 10% por encima del volumen de antes de Covid. Yo diría que los próximos años y décadas serán la época de los viajes en tren, porque los países de Europa están invirtiendo miles de millones de euros en nuevas infraestructuras.
Otros apuestan por su autenticidad, como Georgia, país anfitrión de esta edición de 2023. Según la Organización Mundial del Turismo (OMT), el año pasado los viajes internacionales alcanzaron en todo el mundo el 63% de sus niveles anteriores a la pandemia.
“2022 fue bastante impresionante. En términos de ingresos nos hemos recuperado completamente de 2019, así que hemos vuelto a las pistas, cuenta Levan Davitashvili, ministro de Economía de Georgia.
2023 podría marcar la vuelta del turismo a los niveles anteriores a la pandemia, según la OMT. Pero esto dependerá, cube, de la desaceleración económica, la situación de los viajes en Asia-Pacífico y la evolución de la guerra en Ucrania.
” Fuentes es.euronews.com ”