No va a ser una reunión más del Consejo de la FIFA. La del miércoles 20 de octubre puede marcar el fútbol de los próximos años o por lo menos el escenario que quedará delimitado en el mes de diciembre, momento en el que la Asamblea del máximo organismo del fútbol mundial tenga que aprobar o no las medidas y los cambios que se van a poner sobre la mesa respecto al calendario y competiciones, con la posibilidad estrella de que la Copa del Mundo se celebre cada dos años y no cada cuatro como se ha venido disputando históricamente.
Desde que Arsène Wenger pusiera sobre la mesa el deseo de la FIFA de dar un vuelco al calendario internacional de partidos, el mundo de fútbol se ha posicionado con mensajes contradictorios de los propios actores. Unos reconocen la necesidad de reducir y concentrar los partidos de selección, otros que no ven claro el Mundial bienal... posiciones de todo tipo pero con la frontal oposición de la UEFA, contraria a eso de la celebración de una Copa del Mundo cada 48 meses.
El foco se ha puesto en el gran torneo, en la cita más importante del mundo del fútbol, pero la realidad habla de un intento por parte de la FIFA de suavizar el calendario, de menos cantidad de viajes de los jugadores y de encontrar un entendimiento con los clubes a la hora de reducir el préstamo de los futbolistas para que compitan con las selecciones.
PUNTO DE ACUERDO
Desde la UEFA han sido muy claros y contundentes con la oposición para disputar el Mundial cada dos años, pero sus dirigentes también saben que hay que replantear el calendario y buscar un punto de acuerdo con todos los agentes del fútbol. Un informe pedido por la UEFA apunta a 3.000 millones de euros de pérdidas en cuatro años en derechos comerciales, audiovisuales y taquillas.
En los últimos días por los despachos suizos han vuelto a aparecer dos competiciones que parecían haber quedado en el olvido como el Mundial de clubes en su formato de 24 equipos y una Liga de las Naciones international, a manera de la antigua Copa de las Confederaciones y organizada por la FIFA. Son opciones y alternativas de las que se ha hablado de nuevo en los últimos días.
Arsène Wenger ha insistido en el mensaje con todos los grupos con los que se ha reunido. “En la actualidad hay demasiados parones durante el año, lo que interrumpe la temporada de clubes, ligas, jugadores y aficionados. Al combinar los partidos clasificatorios, se reducen los encuentros y el número de días con la selecciones”.
Manejan dos opciones. El primero tendría dos parones anuales: uno, en el mes de octubre y otro en el mes de junio, destinado a fase finales. El segundo hace referencia a tres parones anuales: uno en octubre, otro en marzo y otro en junio (fases finales).
” Fuentes www.marca.com ”