En ocasiones, a la hora de hacer un viaje colocamos en los asientos de atrás del vehículo algunas de nuestras pertenencias como mochilas, maletas, o incluso bolsas de la compra. Sin embargo, son muchas las multas y sanciones que te pueden poner los agentes de tráfico si te sorprenden cometiendo alguna infracción. Ahora que se acerca el verano y proliferan los viajes en coche, es necesario estar alerta y ser consciente de qué tipo de multas pueden ponerte los responsables de Tráfico.
A la hora de realizar viajes con equipaje, la Dirección General de Tráfico (DGT) advierte del llamado ‘efecto elefante’ que puede provocar graves lesiones en caso de accidente. Este no solo tiene consecuencias físicas en los conductores, sino que también puede conllevar una sanción económica: hablamos de 200 euros de multa.
Cuidado con colocar mal la carga
Al principio, puede parecer que este comportamiento no tiene ninguna importancia, sin embargo, la cosa se complica en caso de accidente.
La DGT ya alerta de la importancia de colocar este tipo de productos en un lugar adecuado en el artículo 14 del Reglamento General de Circulación: “La carga transportada en un vehículo, así como los accesorios que se utilicen para su acondicionamiento o protección, deben estar dispuestos y, si fuera necesario, sujetos de tal forma que no puedan: arrastrar, caer total o parcialmente o desplazarse de manera peligrosa”.
¿Qué es el ‘efecto elefante’?
El llamado ‘efecto elefante’ ocurre cuando “cualquier objeto que viaje suelto en un automóvil continúa su marcha hacia delante y multiplica, por efecto de la velocidad, la fuerza con la que golpearía a cualquier ocupante hasta por cuarenta veces su peso a tan solo 50 kilómetros por hora”, según la DGT.
Por ello, la Dirección General de Tráfico recomienda guardar todos los objetos en el maletero de forma adecuada, sin que los objetos que se colocan impidan la vista trasera.
Situación aún más peligrosa sin cinturón
Este’ efecto elefante’ es aún más peligroso cuando un pasajero del vehículo que se coloca en el asiento trasero viaja sin cinturón, ya que este golpearía directamente al conductor o copiloto en caso de frenazo. Todo ello con una fuerza que equivale, en función de su peso y velocidad del vehículo, al peso de un elefante.
“El riesgo que implica que los pasajeros no se abrochen el cinturón de seguridad no es solo que se lesionen ellos mismos en caso de accidente, sino que golpearán los asientos delanteros con la fuerza de su peso, multiplicada por la velocidad a la que circulen”, alerta la DGT.
” Fuentes www.mundodeportivo.com ”