En la actualidad, la industria turística se encuentra en constante evolución. Ya no se trata solo de ofrecer una experiencia satisfactoria a los turistas, sino también de generar un valor agregado para el entorno natural, cultural, para las empresas y sobre todo, para las personas.
En este sentido, Carlos Álamo, reconocido experto en turismo sostenible, destaca la importancia de que la industria turística vaya más allá de su tradicional visión enfocada en el lucro económico. Para Álamo, es crucial que se genere un impacto positivo en el entorno en el que se desarrolla la actividad turística.
Uno de los pilares fundamentales para lograr este objetivo es el respeto por el entorno natural. Es necesario que los destinos turísticos sean conscientes de la importancia de conservar y preservar su patrimonio natural, ofreciendo a los turistas experiencias en armonía con la naturaleza. De esta manera, se fomenta la conciencia ambiental y se garantiza la sostenibilidad de la actividad turística a largo plazo.
Además, es esencial que se valore y promueva la cultura local. Cada destino turístico tiene una riqueza cultural única que debe ser respetada y compartida con los visitantes. La promoción de actividades culturales, como festivales, celebraciones tradicionales, gastronomía local, entre otras, no solo enriquecen la experiencia del turista, sino que también contribuyen al desarrollo económico y social de la comunidad local.
Por otra parte, Carlos Álamo hace hincapié en el papel de las empresas en este proceso de generación de valor. Para él, es necesario que las empresas turísticas se comprometan con prácticas sostenibles, tanto a nivel medioambiental como social. Apostar por el uso de energías renovables, reducir el consumo de recursos, fomentar el empleo local y respetar los derechos laborales son solo algunas de las acciones que pueden emprender las empresas para contribuir de manera positiva al entorno en el que operan.
En definitiva, el turismo del siglo XXI debe ser una industria que no solo satisfaga las necesidades de los turistas, sino que además genere un impacto positivo en el entorno natural, cultural y social. Es responsabilidad de cada actor involucrado en la actividad turística, desde los destinos hasta las empresas y las personas, trabajar de manera conjunta para lograr un turismo sostenible y beneficioso para todos. Solo así se garantizará un futuro próspero, en el cual las generaciones venideras puedan disfrutar y valorar todo lo que el turismo tiene para ofrecer.
” Sources www.digitalfarocanarias.com ”
” Sources www.digitalfarocanarias.com ”