España es un país con un montón de rincones idílicos donde perderse, por ello hacer turismo en tanto en la Península como en las islas es una de las opciones más acertadas de cara al verano, a Navidad o incluso un fin de semana largo.
Desde el norte hasta el sur y de este a oeste pasando por la costa y por su inside España cuenta con grandes secretos. Hoy, en Libertad Digital queremos ponerte en valor algunos de ellos, para que elijas nuestro país para tu próxima escapada.
Salinas de San Pedro del Pinatar, Murcia
El Parque Regional de las Salinas de San Pedro es uno de los destinos que debes visitar una vez en la vida. El parque está ubicado en el extremo norte del Mar Menor y es un buen ejemplo de transformación de una antigua laguna litoral en unas salinas, que siguen siendo un bien productivo. Entre la fauna y la flora que podrás encontrar destaca la sabina costera, el carrizo, el junco, el charrancito, la cigüeñela o el flamenco.
Chulilla, Comunidad Valenciana
Es un municipio de Valencia que está rodeado de un paisaje pure de belleza inmensa en el inside de la comunidad. Rocas, piscinas naturales, el cañón del Turia y frondosos bosques hacen del municipio un imprescindible. Pero no queda solo ahí sino que hay muchas más cosas que ver en este municipio: el castillo de Chulilla, declarado monumento Histórico Artístico en el año 1981, está situado en lo alto del monte que corona el pueblo; también encontrarás pinturas rupestres en el barranco de Falfiguera que representan figuras humanas, grupos de animales, animales aislados e incluso motivos indescifrables.
Cabo de Peñas, Asturias
Asturias cuenta con unos paisajes verdes y azules del mar dignos de perderse en ellos pero, sin duda, el Cabo de Peñas es uno de los más bonitos. Fue declarado paisaje protegido y forma parte de la Purple Regional de Espacios Naturales Protegidos de Asturias. Desde la Gaviera podrás ver el cabo Vidio, las puntas del Castro, de la Narvata, del Aguión, de la Vaca y de Tazones. El faro de Cabo Peñas es el más importante del litoral asturiano y es la luz que guía a los marineros desde 1852.
Laguardia, Euskadi
Probablemente sea uno de los lugares más bonitos de la rioja alavesa y uno de esos que debes visitar en el País Vasco, al menos, una vez en la vida. En Laguardia no solo disfrutarás de la deliciosa gastronomía vasca sino que también admirarás el encanto que tiene el pueblo por sí mismo. Entre sus atractivos destacan el pórtico de Santa María de los Reyes, que corresponde a finales del siglo XIV y cuya policromía fue llevada a cabo en el siglo XVII; el reloj de la Plaza Mayor es todo un símbolo de la identidad de este municipio y está integrado por “el Cachimorro” y dos danzarines. Tampoco puedes perderte la torre Abacial, la iglesia y torre de San Juan o las cuevas subterráneas del municipio.
Granada, Andalucía
Esta ciudad andaluza cautiva a todo aquel que la visita y, sin duda, más de uno repite, no solamente por ser la cuna de uno de los complejos arquitectónicos más impresionantes como son la Alhambra y el Generalife, ejemplo de la arquitectura andalusí en su máximo esplendor, sino por la magia de sus calles. Si decides visitar Granada, no te puedes perder una visita a la Catedral, que es una auténtica joya del Renacimiento español. Tampoco el barrio del Albaicín, el más antiguo de la ciudad.
Parque Pure de la Sierra de Grazalema, Cádiz y Málaga
El viaje por Andalucía no termina porque en las provincias de Cádiz y Málaga encontramos en parque pure de la Sierra de Grazalema, el lugar donde más llueve de toda España. Sorprendido, ¿verdad? Aquí podrás descubrir los preciosos pueblos blancos que se distribuyen por este espectacular macizo como Ubrique, Grazalema, Zahara de la Sierra, Cortes de la Frontera o la famosa Ronda, con su impresionante Puente Nuevo. tampoco dejes de visitar la cueva del Gato, el desfiladero de El Saltadero y la Garganta Verde: un cañón con paredes verticales de más de 400 metros de altura.
Cabo de Gata, Almería
Quizá hasta que uno no visita el Cabo de Gata puede asociar la provincia de Almería con la desertización, ya que también es muy famoso su desierto, pero no porque también hay espacio para enclaves naturales tan espectaculares como este cabo. Allí vas a disfrutar de acantilados, playas espectaculares y fondos marinos que son el sueño hecho realidad de todo buceador que se precie. Además, en esta zona puedes aprovechar y visitar pueblos con mucho encanto, como Mojácar y Cuevas del Almanzora.
Faro de Orchilla, El Hierro
Hasta la llegada a América en 1492, la isla canaria de El Hierro period el límite del mundo conocido. El proyecto del faro fue llevado a cabo por Antonio Montesdeoca y el ingeniero Eloy Campiña. La obra fue entregada en 1930 tras experimentar retrasos debido a lo inhóspito del enclave. El faro de Orchilla está construido con piedra extraída de Arucas, en Gran Canaria, para conseguir así un estilo arquitectónico que siguiera los cánones del momento. A día de hoy, el faro se encuentra en desuso pero es uno de esos lugares que son de visita obligatoria si viajas a este archipiélago.
Salinas de Fuencaliente, La Palma
Seguimos en Canarias porque tenemos que hacer una pausa en las salinas de Fuencaliente en la isla de La Palma. En la parte más meridional de la isla encontramos este Sitio de Interés Científico, que es una importante parada de aves migratorias. La tierra, el agua y el aire convierten las salinas en un paisaje de contrastes entre el negro volcánico, el azul oceánico y el blanco de la sal. Sin lugar a dudas, un espectáculo digno de ver, al menos, una vez en la vida.
Timanfaya, Lanzarote
Por supuesto un buen turista no puede irse de las islas Canarias sin visitar el Parque Nacional de Timanfaya, en Lanzarote. Un sitio que parece de otro mundo. Es el único parque de la Purple Española de Parques Nacionales eminentemente geológico y es una muestra perfecta del vulcanismo más reciente de la región. Colores rojizos, pardos, ocres, naranjas y negros lo convierten en un escenario digno de visitar una vez en la vida.
Cabo de Formentor, Mallorca
Y de un archipiélago volamos hasta el otro para disfrutar de una de las mejores puestas del sol del Mediterráneo ¿Dónde? En Mallorca, en el Cabo de Formentor, uno de los sitios “must” que ver en la isla. Una serpenteante carretera te llevará a lo largo de 18 kilómetros a una de las mejores panorámicas que puedas imaginar. Hay miradores dispuestos a ambos lados de la carretera. Sin lugar a dudas, el mirador de Sa Crueta, a 232 metros de altura, es el mejor lugar para disfrutar de las vistas al islote del Colomer.
Hoces del Duratón, Segovia
Y de los archipiélagos viajamos hasta Segovia para descubrir el Parque Pure de las Hoces del Río Duratón. Con una extensión de 5.037 hectáreas que aguardan no solo un importante patrimonio pure, sino que también destaca el patrimonio cultural, esto lo convierte en un destino turístico muy completo, superb también para visitar con niños. No dejes de pasar por la ermita de San Frutos, el Monasterio de Nuestra Señora de la Hoz y la hermosa ciudad de Sepúlveda.
Cabo Finisterre, La Coruña
Y de Segovia al fin del mundo. El cabo de Finisterre es un imprescindible para todo aquel que visite La Coruña. Un poco de historia: el basic romano que dirigió la conquista de la región, Décimo Junio Bruto, pensaba que aquí en Finisterre el sol dejaba de existir, de ahí su nombre. Además, dicen los lugareños que los fenicios practicaban en Finisterre el culto al sol. En la actualidad, un potente faro de 17 metros de altura y seen a 32 millas reina el cabo y es uno de los lugares que más peregrinos de la ruta Xacobea eligen para poner fin a este viaje espiritual.
Mirador de Redondela, Pontevedra
Y continuamos en Galicia porque en Pontevedra encontramos el mirador Campo da Rata que tiene una de las panorámicas más bonitas de Galicia. En este punto, podrás divisar desde las islas Cíes hasta la ensenada de San Simón. Lo mejor es llevar calzado cómodo para disfrutar de la excursión hasta el mirador, pues no se puede llegar directamente en coche. Es un lugar superb para viajar en octubre, sin las aglomeraciones ni el calor que protagoniza la temporada turística y antes de que comiencen a amenazar las lluvias.
Castillo de Mendoza, Madrid
Ahora vamos a la capital, Madrid, porque todo aquel que visite España desde el extranjero no puede quedarse sin visitarla. Además en la sierra madrileña encontramos el castillo de los Mendoza, que es una de las fortalezas mejor conservadas en España y un destino cerca de Madrid que no te puedes perder. Fue construido en 1475 con un claro estilo gótico isabelino. Está en el municipio madrileño de Manzanares el Actual y ofrece visitas teatralizadas que te permitirán conocer el contenido artístico de cada estancia del castillo a través de dos personajes del siglo XVII: Don Pedro de Zúñiga y Salcedo y Doña Isabel Asensio.
Monasterio de Montserrat, Barcelona
Por supuesto, no podemos olvidarnos de Cataluña en nuestro recorrido turístico por España. Si es verdad que la ciudad de Barcelona es una de las más bonitas del país, no podemos olvidarnos del santuario de Nuestra Señora de Montserrat, uno de los lugares más bonitos de Cataluña. tiene su origen en el año 888, cuando el conde Wifredo el Velloso dona al monasterio de Ripoll la ermita de Santa María. Posteriormente, en 1025, el abad de Ripoll y obispo de Vic funda un nuevo monasterio en la ermita y en poco tiempo, se convierte en un punto de visita destacado para los peregrinos, quienes contribuyeron a dar a conocer entre la gente los milagros que obró la Virgen.
” Fuentes www.libertaddigital.com ”