En el sureste de México se esconden auténticos tesoros arqueológicos y paradisíacos paisajes naturales que te dejarán maravillado. Los estados de Oaxaca y Chiapas albergan una gran cantidad de templos mayas que te transportarán a la época dorada de esta civilización milenaria.
En Oaxaca, podrás descubrir impresionantes vestigios de antiguas ciudades mayas, como Monte Albán y Yagul, que se han mantenido en pie a lo largo de los siglos. Estos sitios arqueológicos te permitirán adentrarte en la historia de una de las culturas más fascinantes del mundo.
Pero la magia de Oaxaca no se limita solo a sus templos ancestrales. Sus hermosas playas de aguas cristalinas como Puerto Escondido y Huatulco te invitan a relajarte y disfrutar del sol. Además, su exquisita gastronomía y coloridas tradiciones indígenas harán de tu visita una experiencia inolvidable.
Por su parte, Chiapas te cautivará con sus impresionantes ruinas mayas, como Palenque y Bonampak, que se funden perfectamente con la selva tropical que las rodea. La majestuosidad de sus estructuras y la energía de sus paisajes te dejarán boquiabierto.
Pero Chiapas no solo ofrece historia y arqueología, sino también una increíble biodiversidad que podrás explorar en sus numerosas reservas naturales, como el Cañón del Sumidero y la Selva Lacandona. Aquí podrás admirar de cerca la belleza de la flora y fauna de la región, así como sumergirte en las tradiciones de las comunidades indígenas que habitan estas tierras.
En definitiva, Oaxaca y Chiapas son destinos que lo tienen todo: historia, cultura, naturaleza y aventura. Así que no lo pienses más y anímate a descubrir estos auténticos paraísos escondidos en el corazón de México. ¡Te aseguramos que no te arrepentirás!
” Sources viajes.nationalgeographic.com.es ”
” Fuentes viajes.nationalgeographic.com.es ”