Navegando en el Aire: Lo Que Debes Dejar en Casa para Disfrutar del Viaje
Emprender un viaje en avión siempre es una aventura, ya sea que nos dirijamos a un destino de ensueño, a una importante reunión de negocios, o a reunirnos con seres queridos que no hemos visto en largo tiempo. Si bien la mayoría de nosotros está familiarizado con las pautas básicas de seguridad y lo que está permitido llevar en el equipaje, aún existen ciertos objetos que, sorprendentemente, están prohibidos a bordo y pueden causar más de un contratiempo en nuestra travesía aérea.
La seguridad en los vuelos es un asunto tomado muy en serio por todas las aerolíneas y autoridades aeroportuarias del mundo. El control riguroso de lo que puede ser llevado en cabina o facturado en el equipaje va más allá de los líquidos en envases mayores de 100 mililitros o los objeciones punzocortantes obvios. Existen objetos menos evidentes que, por razones de seguridad, han sido completamente vetados de nuestros viajes en las nubes.
Para empezar, algo que podría no ser tan conocido es la prohibición de transportar briquetas o mecheros con forma de granada o cualquier otro artefacto que emule a armas de fuego o explosivos, incluso si son claramente juguetes o accesorios de moda. La razón detrás de esta medida es que pueden causar confusión y pánico entre otros pasajeros y la tripulación.
Asimismo, aquellos amantes de la aventura al aire libre deben tener en cuenta que los equipos de campamento que han sido usados y pueden tener rastros de combustibles, como estufas portátiles, pueden ser motivo de inspección y eventual rechazo si no han sido limpiados apropiadamente. La razón es que residuos de gasolina o cualquier otro combustible representan un riesgo de inflamabilidad.
Otra categoría de objetos que quizás sorprenda a muchos son los dispositivos de autodefensa, como los sprays pimienta o táseres. Aunque pueda parecernos una medida práctica de seguridad personal, la portación de estos dispositivos está estrictamente prohibida a bordo debido a los riesgos que representan para la seguridad colectiva en un espacio confinado y altamente regulado como lo es el interior de un avión.
Igualmente, aquellos pasajeros que pretendan llevar instrumentos musicales, por inofensivos que parezcan, deben asegurarse de conocer la política específica de la aerolínea respecto a su transporte, ya que algunos de mayor tamaño deben ser facturados bajo ciertas condiciones para evitar daños durante el vuelo.
En resumen, viajar en avión es una experiencia que requiere de una preparación y conocimiento previo no solo en lo que respecta a nuestro destino, sino también en relación con lo que decidimos llevarnos en el viaje. Las regulaciones de seguridad son extensas y variadas, y conocerlas puede ahorrarnos tiempo y contratiempos. Antes de hacer las maletas, asegúrate de revisar la lista de lo que puede ser llevado en cabina y lo que mejor deberías dejar en casa. Así, tu próxima aventura aérea será tan tranquila y placentera como lo habías imaginado.
” Sources www.eluniverso.com ”
” Fuentes www.eluniverso.com ”
