Las bolitas de carne picada, aderezadas con ingredientes como huevo, leche, pan rallado, especias, hierbas aromáticas… forman parte de los recetarios de medio mundo desde hace siglos. En España, por ejemplo, reciben el nombre de albóndigas (del árabe albunduq, literalmente avellana) y una de las maneras más tradicionales de prepararlas es en salsa con tomate. Por supuesto, estas albóndigas ‘de toda la vida’ (las de las abuelas, que tanto nos gustan) conviven con infinidad de versiones, tan ricas o más: albóndigas de pescado, de legumbres, vegetarianas, de queso…
Su versatilidad hace que, según cómo las cocinemos, las albóndigas puedan figurar en nuestros menús como plato principal (incluso a veces como plato único, dada su contundencia si las hacemos con salsas ‘poderosas’), o bien como pequeño snack o aperitivo si las acompañamos de alguna salsa para ‘dipear’…
Pero hay otra forma en la que las albóndigas nos gustan también muchísimo: entre pan y pan. ¿No sería, acaso, una variante de la tradicional hamburguesa?…
Así que, como hoy nos hemos levantado con antojo de este tipo de bocadillo, vamos a colgarnos el delantal y a cocinar hasta seis versiones diferentes: elige el pan que más te guste (pita, bollitos de hot dog, baguettes, tortillas de maíz o trigo… ) ¡y a cocinar! (para acceder al paso a paso solo tienes que hacer click on en el nombre de cada receta).
Lee también: Trucos para hacer albóndigas de carne y patata
” Fuentes www.hola.com ”