Desde el corazón de la Costa Blanca, la idea de rodar por pendientes nevadas puede parecer lejana. Sin embargo, Alicante ofrece a sus visitantes y residentes la inigualable oportunidad de cambiar, en pocas horas, la arena por la nieve. Aquí, descubrimos destinos fascinantes para los aficionados del esquí, accesibles desde este enclave mediterráneo.
Primero en nuestra lista es Sierra Nevada, un paraíso para los esquiadores y snowboarders. Con sus impresionantes vistas y pistas para todos los niveles, este destino no solo ofrece nieve de calidad sino también la posibilidad de disfrutar del sol granadino. Situada a unas cinco horas en coche de Alicante, Sierra Nevada se postula como una opción excelente para aquellos que buscan combinar deportes de invierno con el sabor andaluz.
No menos importante es la estación de Valdelinares, ubicada en la comarca de Gúdar-Javalambre en Teruel. A aproximadamente cuatro horas de trayecto desde Alicante, Valdelinares destaca por ser una elección ideal para familias y principiantes, gracias a su ambiente acogedor y pistas que favorecen el aprendizaje y la diversión.
Otra joya es la estación de Javalambre, hermana de Valdelinares y también enclavada en la provincia de Teruel. Requiere el mismo tiempo de viaje desde Alicante y ofrece pistas variadas que satisfacen tanto a principiantes como a esquiadores más avanzados, garantizando una experiencia memorable en la nieve.
Al dirigirnos hacia el norte, encontramos la Vall de Núria en Girona, Cataluña. Aunque el viaje se alarga a unas seis horas en coche, la magia de este lugar, accesible únicamente por un tren cremallera que escala montañas, promete una experiencia única, rodeado de paisajes espectaculares y pistas para disfrutar de deportes de invierno.
Finalmente, Por último, pero definitivamente no menos espectacular, Les Angles en Francia ofrece un toque internacional a esta lista de destinos accesibles desde Alicante. A unas seis horas y media en coche, este pintoresco pueblo de montaña no solo cuenta con excelentes pistas sino que también brinda una oportunidad para sumergirse en la cultura francesa, con su gastronomía y el encanto de los Alpes.
Aunque pueda parecer sorprendente, Alicante se posiciona como un punto de partida excepcional para aquellos que desean explorar las montañas y pistas de esquí que se esconden, no muy lejos, en este rincón de Europa. La posibilidad de pasar de las costas soleadas a las montañas nevadas en menos de un día es una dualidad encantadora que pocos lugares en el mundo pueden ofrecer.
Para los amantes del deporte blanco, los destinos mencionados abren un abanico de opciones para disfrutar de la nieve, la aventura y la belleza natural, todos accesibles desde la tranquilidad y el clima cálido de Alicante. Ya sea por la proximidad, la calidad de sus pistas, o la magia de sus paisajes, estos lugares prometen convertir cualquier escapada invernal en una experiencia inolvidable.
” Sources alicanteout.com ”
” Fuentes alicanteout.com ”