Las agencias de viajes españolas dejaron de facturar 18.500 millones de euros en 2020 debido a la gran disaster que la COVID-19 ha provocado en el sector turístico. El presidente de la Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas (ACAVE) Martí Sarrate, ha explicado a EFE que, mientras la facturación de las agencias de viaje fue de 21.000 millones en 2019, el año pasado, la cifra se redujo hasta los 2.500 millones.
El sector vive una situación “muy complicada” tras un año casi sin facturar, con altos costes y ayudas directas “que se retrasan mucho”. De hecho, según Sarrate, han cerrado entre un 20 y un 30% de las agencias y, si no hay ayudas directas, pueden llegar al 50%.
El sector da la Semana Santa por perdida, ya que solo prevé que se realicen desplazamientos en coche entre las propias comunidades autónomas mientras siga vigente el cierre perimetral y el confinamiento autonómico, así como los toques de queda.
Aunque se espera que a partir del segundo semestre del año se empiece a reactivar el turismo, Sarrate prevé que la “normalidad” puede tardar en llegar entre 2,5 y 4 años, cuando la conectividad esté totalmente restablecida, cosa que “cada vez se retrasa más”.
La Unión Nacional de Agencias de Viajes (UNAV) también ha hecho un “balance muy pesimista” de la situación que atraviesan las empresas del sector, “agravado por la clausura perimetral en Semana Santa y un ritmo de vacunación que, de no aumentar, resultaría a todas luces insuficiente para llegar a la temporada de verano“.
La organización ha advertido que “pueden cerrar cuatro de cada diez agencias de viajes en España” si no reciben ayudas directas del Gobierno. “Con la crisis sanitaria han perdido cerca del 80% de su facturación en 2020 y el 84,5% de los agentes creen que será imposible recuperar los niveles de facturación del año previo a la pandemia”, asegura en un comunicado
El presidente de UNAV, José Luis Méndez, explicó que no pueden ser más pesimistas con la situación “un año después del inicio de esta crisis sanitaria, que ha derivado en una crisis económica sin precedentes”. “Los agentes de viajes queremos trabajar, pero no podemos y tenemos que tener nuestros negocios cerrados. Por ello reclamamos mayor sensibilidad hacia nuestro colectivo. Necesitamos ayudas directas para garantizar nuestro futuro”, afirma.
” Fuentes www.lainformacion.com ”