Siempre hay motivos para celebrar en el fantástico “mundo Disney”. Y especialmente este año, en el que Walt Disney World Resort en Orlando, Florida, festeja sus primeros 50 años de vida con un cronograma de celebraciones de 18 meses, que comenzó en septiembre del año pasado y se extenderá hasta marzo 2023.
Un aniversario que se cumplió en 2021 pero, pandemia mediante, el festejo debió esperar hasta que mejoraran las condiciones sanitarias y este mundo de magia y fantasía reabriera con toda su magia. Y recargada.
Primer dato: en Disney parece no existir ya la pandemia. No hay protocolos, ni barbijos -algunos pocos aún los usan-, ni distancia social, y el alcohol en gel es un producto en vías de extinción.
¿Es un mundo para niños? Claro, pero mucho más también. Solo hay que darse una vueltita para encontrarse con muchas familias, pero también con muchos, muchos adultos sin niños, y parejas de todas las edades vistiendo a tono: remeras, camisas, pantalones cortos con figuras de los personajes, gorros con las orejas de Mickey, vinchas, zapatillas. Todo vale para declarar la fidelidad a este mundo de fantasía.
Domador de pantanos
Es difícil imaginar la titánica tarea que implicó levantar el primero de los parques de Disney en Florida, Magic Kingdom, que comenzó a construirse en 1967, menos de un año después de la muerte de Walt, y abrió sus puertas en 1971.
A punto de aterrizar en el aeropuerto de Orlando, la ventanilla deja ver el panorama continuo de lagunas y pantanos, muchos de ellos ahora “domados” por obras de ingeniería y cruzados por rutas y autopistas.
Esos pantanos fueron los que sobrevoló el propio Walt Disney en 1963, en busca de un lugar para extender su mundo de entretenimiento hacia el este: Disneyland había abierto en California en 1955, pero solo el 5% de los visitantes provenía del este del país, donde vivía más del 70% de la población. A ella quería llegar Walt.
Y vaya si lo logró. Eso y mucho más: solo Magic Kingdom recibió casi 21 millones de visitantes en 2019, el año previo a la pandemia. Hoy, Walt Disney World Resort ocupa 12.000 km2 y es el complejo de entretenimiento más grande del mundo, con cuatro parques temáticos, dos parques acuáticos, seis circuitos de golf, un complejo deportivo.
Y también un gran centro comercial a cielo abierto, casi 40 hoteles -entre propios y no propios- y cantidad de tiendas, bares y restaurantes -muchos de ellos, temáticos- y una oferta de entretenimiento y programas de eventos que funcionan en continuado, todos los días del año, desde la 8 de la mañana hasta casi la medianoche, y maravillan a personas de todas las latitudes.
Pero volvamos a 2022 y las celebraciones por el 50 aniversario. Nuestro primer contacto con estos festejos es en el segundo de los cuatro parques temáticos inaugurado en Orlando, el 1 de octubre de 1982: Epcot, un complejo que Walt había planeado como una ciudad.
La imaginó, allá por la década del 60, como la ciudad del futuro, que estaría conectada por monorraíles, con tráfico de vehículos subterráneo y calles solo para peatones. De allí su nombre: EPCOT fue el acrónimo de Experimental Prototype Neighborhood of Tomorrow: Prototipo de Comunidad Experimental del Mañana. Hoy es simplemente Epcot.
A las 21 en punto, luego de una gran cena en el restaurante Tutto Italia, el espectáculo de luces y música “Harmonious” inicia -para nosotros, visitantes recién llegados- este programa de celebraciones.
Los paisajes y personajes de Moana, Aladino, Coco, Valiente, el Rey León, Mulan, La Princesa y el Sapo, entre otras historias, desfilan por inmensas pantallas led diseñadas especialmente y colocadas sobre la World Showcase Lagoon, junto con fuentes danzantes, luces, láseres y fuegos artificiales, en lo que los propios dueños de casa definen como “uno de los espectáculos nocturnos más grandes jamás creados para un parque Disney”.
Las espectaculares imágenes y los efectos bailan y entrelazan historias y música reinterpretadas por 240 artistas con el mensaje de que, más allá de idiomas y fronteras, podemos estar unidos.
No es la única novedad con la que festeja Epcot. Otra muy importante es Guardians of the Galaxy: Cosmic Rewind, una montaña rusa que inauguró a fines de mayo e incluye el primer pabellón de exhibición de “otro mundo”, el de Xandar, y una tecnología de vanguardia.
El entretenimiento nos invita a “salvar la galaxia” en una vertiginosa persecución intergaláctica a través del tiempo y el espacio junto con los héroes de Marvel y los forajidos cósmicos Rocket, Groot, Drax, Gamora y Star-Lord (o Peter Quill).
Mucho más que una easy montaña rusa, está envuelta en una historia que se va desarrollando en la previa -así la cola, que puede ser larga como en todas las atracciones, no se hace para nada tediosa- y comienza en el Galaxarium, una especie de planetario que exhibe estrellas, planetas y otras maravillas intergalácticas que conectan a Terra y Xandar.
Luego pasamos por la Xandar Gallery, donde aprendemos sobre el pueblo, la cultura y la historia de Xandar, incluidos sus héroes, mediante exhibiciones con modelos de naves espaciales y una ciudad xandariana. También vemos una entrevista a los Guardianes de la Galaxia antes de concluir el recorrido en la Part Chamber, desde donde nos transportamos al crucero Nova Corps Starcharter, que orbita la Tierra: comienza la acción.
Guardians of the Galaxy: Cosmic Rewind no sólo es la montaña rusa cerrada más larga de todos los parques temáticos de Disney y una de las más largas del mundo; también es la primera de lanzamiento inverso -acelera súbitamente hacia atrás- e introduce la tecnología omnicoaster, que hace que cada carrito, además de round a velocidades vertiginosas, gire sobre sí mismo, para mantenernos siempre en el foco de la acción, en un viaje por el espacio en el que los malvados aparecen de pronto desde todos los ángulos.
“Es un nuevo hito en la transformación de Epcot y forma parte de la celebración del 50° aniversario de Walt Disney World”, señalan desde “centro mundial del entretenimiento”.
Justo enfrente, cruzando por debajo del monorraíl, abrió recientemente Eatery Connections, el mayor restaurante quick meals del parque, con enormes espacios, mucha luz pure y una ambientación que invita a relajarse un buen rato.
Eso sí, después de levantarse de la silla, hay que pasar por otro nuevo espacio: Creations Store, tienda de merchandising donde podrá comprar no sólo lo que imaginaba, sino mucho más, bajo grandes y dinámicos murales con los personajes de Disney.
Con un sector “internacional”, que suma pabellones de varios países –Francia, Italia, China, Japón, México, Marruecos, entre otros-, Epcot aporta un pantallazo multicultural en el que la gastronomía es elementary, y hasta tiene su propio competition de vinos y comidas que comenzó el 14 de julio y sigue hasta el 19 de noviembre.
Luego del segundo día en el lugar, ya me animo recomendar, además de Tutto Italia, el restaurante chino 9 Dragons, donde no faltan las empanadas chinas de pollo, la sopa caliente y picante de la casa o el arroz frito con pato crujiente, entre otros platos, la verdad, sabrosos y abundantes.
En el pabellón de Francia, hace poco inauguró Remys’s Ratatouille Journey, una atracción 4D que nos transforma en el famoso ratón chef y nos lleva a la cocina y el salón -con aromas, salpicaduras y todo- del restaurante parisino de Gusteau.
Y aunque no son nuevos, vale la pena disfrutarlos antes de dejar Epcot: el tranquilo paseo en un barco nórdico de Frozen Ever After y la adrenalina de Mission Area -¿cómo harán para simular la Fuerza G del despegue del cohete, que nos aplasta contra los asientos?- y el fenomenal Soarin’ Round The World, un fantástico sobrevuelo por algunos de los paisajes más espectaculares del mundo. ¡Cuidado, levantá los pies que te chocás con la cima del Kilimanjaro!
Dividido en cuatro sectores -Celebration, Discovery, Nature y Showcase-, Epcot va camino a transformarse en una especie de centro de festejos multicultural. En el área Celebration se está creando la nueva plaza Communicore, que tendrá un edificio para recitales, presentaciones, and so on., rodeado de jardines y senderos.
Una visita a otro planeta
Permítame ahora otra recomendación: no se pierda Drawn to Life, el nuevo espectáculo que Cirque du Soleil ofrece en el teatro de Disney Springs, el centro comercial a cielo abierto del resort. A las espectaculares acrobacias que nunca defraudan, este present suma una emotiva narración inspirada en el legado de 100 años que dejó Walt Disney con sus animaciones. La historia de Julie, a quien su padre le dejó una carta antes de morir con una historia inconclusa que ella resolve continuar, enfrentando los fantasmas enemigos de la creación, es una delicia.
Es todavía el atardecer cuando pasamos junto al icónico Hollywood Tower Lodge, en Disney’s Hollywood Studios, a unos 6 km de Epcot. Hollywood Studios es el tercero de los parques, inaugurado el 1 de mayo de 1989 con el nombre de Metro-Goldwyn-Mayer (MGM) y que cambió su nombre por el precise en 2008.
Y como aún hay sol, la famosa torre que es un juego de caída libre no está encendida como se ve por las noches, cuando luces de colores homenajean el brillo de la época de oro de la imaginación y la fantasía.
Pero llegamos a este parque, dedicado a películas de Hollywood, para disfrutar una noche especial en su área más espectacular: Star Wars: Galaxy’s Edge, que inauguró en 2019 y es una impresionante inmersión en el planeta Batuu.
Galaxy’s Edge es una visita a los escenarios de una de las sagas más famosas, donde se puede tripular el célebre Millennium Falcon en Smuggler’s Run, o unirse a la resistencia en una adrenalínica batalla contra la Primera Orden en Star Wars: Rise of the Resistance.
Cuando somos tomados prisioneros por un Star Destroyer y nos hacen bajar para ingresar en una sala impresionantemente grande con una pantalla de varios metros que es una ventana al universo, vigilados por decenas de stormtroopers, es muy difícil no sentirse dentro de uno de los episodios de la saga.
Caminando por Batuu, además, uno puede cruzarse con una increíble réplica del Millennim Falcon, fabricar su propio sable de luz en una tienda clandestina, saborear la leche azul o verde que tomaba Luke Skywalker o entrar en una plataforma de hangares en funcionamiento para saborear platos galácticos en Docking Bay 7 Meals and Cargo.
Otro anticipo: en breve estarán funcionando las MagicBand+, unas pulseras que, además de ofrecer información de pago, abrir la puerta de la habitación o albergar el ticket digital para entrar a los parques, invitará a una especie de “búsqueda del tesoro”.
Funcionará así: en los cuatro parques hay diseminadas 50 estatuas doradas de los personajes. Cuando el visitante se acerque a alguna, la pulsera vibrará y cambiará de coloration. Entonces habrá que saludar agitando la mano para recibir una frase de bienvenida de parte del personaje.
Y hay más: en Star Wars se podrá participar del Batuu Bounty Hunters con ayuda de la pulsera, que empezará a parpadear en verde cada vez más rápido si nos acercamos a un objetivo, que no es otra cosa que algún personaje escondido por allí. Si, por el contrario, nos alejamos, titilará en rojo.
A ten km en auto o bus de Epcot está Animal Kingdom, el más nuevo de los parques de Disney en Orlando, que abrió en abril de 1998 con una temática específica: el cuidado de la naturaleza. También es el más grande, y su entorno verde, con buena sombra gracias a su frondosa arboleda, es un alivio para el calor que azota esta zona de la Florida buena parte del año; digamos, de mayo a septiembre.
Entre las muchas atracciones de este reino de animales, las de las colas más largas son Expedition Everest, una montaña rusa que trepa por los Himalayas y se encuentra con el Yeti luego de desbarrancarse marcha atrás; y Pandora-The World of Avatar, en el que, a bordo de algo así como motos o jets skis, y con anteojos especiales, podemos iniciarnos como Na’vi y volar -con un poco de vértigo, sí- sobre el lomo de un banshee por el fantástico paisaje de la luna de Pandora.
Encanto en el reino de la magia
Ahora sí. Nada mejor que despedirse en Magic Kingdom, el lugar donde nació la magia en Florida y que conserva muchos de aquellos juegos iniciales; simples, inocentes, encantadores de Circus, Fantasyland y Tomorrowland. Cómo no sonreír ante la simpleza de “Dunbo, el elefante volador”, que encanta tanto a los niños de hoy como a los de hace 50 años.
Y, como no podía ser de otra manera, Magic Kingdom es el epicentro de los festejos por el aniversario. Entramos y vamos directo al City Sq. Theater para encontrarnos con el dueño de casa: tras bambalinas, Mickey nos recibe con un elegante atuendo de saco y chaleco, en tonos celeste y dorado, y su sonrisa eterna.
Al salir, la plaza frente al teatro es una fiesta de colores, globos gigantes, música, papelitos: está pasando el desfile de carrozas que recorre el parque, desde Frontierland hasta Primary Road, pasando por Liberty Sq., y que es uno de los puntos fuertes de “La celebración más mágica del mundo”.
Una fiesta de música, baile y colores encabezada por “The EARidescent 8”, ocho de los personajes históricos de Disney, elegantemente ataviados: las ardillitas Chip & Dale, Goofy (ojo, que para los que contamos algunos años sigue siendo “Tribilín”), Pluto, Donald y Daisy y, por supuesto, Minnie y Mickey. Anima el parque a las 10.45, 13.30, y 16.30, y es imperdible.
Tanto como el remaining, a toda orquesta: el nuevo espectáculo de luces, música y fuegos artificiales “Encanto”, a las 21.20 y a las 23, que enciende el castillo de Cenicienta e ilumina la noche, al ritmo de canciones clásicas y reversionadas, y una nueva canción unique de Philip Lawrence. El impactante espectáculo debutó como parte de The World’s Most Magical Celebration y nos recuerda: ¡La magia siempre ha estado dentro de ti!
Una app con toda la magia
Es cierto que exige andar chequeando el celular, pero la app “My Disney Experience” es una maravilla que guía y resuelve situaciones con solo un click on. Permite planificar la visita a Disney Orlando desde antes de partir de casa. Por ejemplo, a través de ella se puede hacer el verify in del resort (siempre que sea un resort Disney) para ir directo a la habitación, sin pasar por recepción. También permite reservar mesa en restaurantes u ordenar la comida o desayuno para retirar sin esperas, chequear horarios de parques y eventos e incluso pispear los tiempos de espera de atracciones y encuentros con personajes.
Además, las fotos que te tomen los fotógrafos de Disney van directo a tu celular, y se pueden hacer compras directamente desde la app, sin colas ni esperas. También podés ir controlando los cargos que se generen en tu habitación de resort, para no recibir una “sorpresa” a la hora del take a look at; reservar turno para Star Wars: Galaxy’s Edge;y hasta encontrar tu auto si no sabés en qué sitio del estacionamiento lo dejaste. Una opción additional de la app es el Disney Genie, en sus tres versiones: Genie, Genie Plus y Genie Plus con elección particular person.
La base -gratuita- permite armar un itinerario según los gustos declarados, consultar a un asistente digital, anticipar tiempos de espera, ordenar en restaurantes de servicio rápido y reservar mesa en restaurantes desk service. La versión Plus (US$ 15 más impuestos por día) permite usar las Lightning Lanes o ingresos rápidos a más de 40 atracciones preseleccionadas (quedan fuera las más populares de cada parque).
El Genie Plus con elección particular person, en cambio, permite elegir la atracciones a las que quieras acceder por Gentle-ning Lane, abonando solo el costo de acceso rápido a la atracción elegida (varía según época del año, hora del día y demanda, pero para las atracciones más populares es de US$ 7 a US$ 15 por persona por atracción. El costo de aprovechar mejor el tiempo en Disney sin hacer tantas largas colas.
MINIGUIA
Cómo llegar
De Buenos Aires a Orlando no hay vuelos directos; tienen como mínimo una escala. Por American Airways (vía Miami), desde US$ 1.454 ida y vuelta. Por Aerolíneas Argentinas (vía Atlanta o NuevaYork), desde $ 259.633 (tarifas para agosto). También vuelan United Airways (vía Houston), Delta Airways (Atlanta), Aeroméxico (CDMX), Copa Airways (Panamá), LATAM (San Pablo) y Avianca (Bogotá).
Dónde alojarse
Dentro de Disney hay gran cantidad de hoteles de distintas características y categorías, e incluso un tenting, que es la opción más económica: US$ 74,25 por noche por un sitio para hasta dos carpas y 10 adultos.
Los hoteles más económicos, como All-Star Music Resort u All-Star Sport Resort, cotizan desde US$ 128 la noche en habitación estándar (hasta 4 adultos). Las tarifas base llegan hasta US$ 757 en habitaciones para hasta 5 adultos en hoteles como Grand Floridian Resort & Spa.
Y entre las opciones más lujosas, puede llegar hasta US$ 3.220 (hasta 4 personas) en el Grand Suite-Membership Degree del Grand Floridian Resort & Spa. Fuera del área Disney, en Orlando hay habitaciones dobles en hoteles 3 estrellas por US$ 68 la noche.
Dónde comer
En los parques hay puestos de comida rápida, snacks y restaurantes de distintas categorías y gastronomía internacional. Agua mineral chica, US$ 3,50; gaseosa chica, US$ 4,69; hamburguesa con papas y bebida, de US$ 12 a US$ 16. Desayuno de sándwich de jamón y queso fontina, huevo revuelto y fruta, US$ 8.99. Desayunos y menús para chicos, US$ 7,49.
Cuánto cuesta
Entrada por el día a cada uno de los parques, US$ 109 (chequear disponibilidad por la internet o app). Hay descuentos por cantidad de días; por ejemplo, 5 días, US$ 91 por día; 10 días, US$ 55 por día.
Cómo moverse
Se puede llegar a todos los parques en auto, pero para moverse de uno a otro, o desde y hacia los hoteles, lo más conveniente es el transporte público de Disney (buses, monorrail, ferries y teleférico), que es gratuito y pasa con frecuencia.
Dónde informarse
disneyworld.disney.go.com/es-ar/
” Fuentes www.clarin.com ”