Un verano como el presente, hace 30 años, veía la luz la película Mi Idaho privado de Gus Van Sant –conocido posteriormente por El indomable Will Searching (1997) o Milk (2008)– protagonizada por los actores Keanu Reeves y River Phoenix que rápidamente se convirtió en una obra de culto y referente del colectivo LGBITQ+.
River Phoenix habría cumplido hoy 52 años. Sus padres John Lee Backside y Arlyn Sharon Dunetz, criaron a sus hijos –River, Joaquín (Antes Leaf), Liberty, Rain y Summer time– mientras viajaban por medio mundo cumpliendo las misiones de la secta Los Niños de Dios. Con el tiempo, se dieron cuenta que este grupo religioso comenzaba a realiza prácticas disfuncionales –como organizar ritos de iniciación mediante orgías–, así que abandonaron la congregación y escaparon a Estados Unidos escondidos en un barco pesquero. La familia buscó refugio en casa de sus abuelos paternos en Florida. Fue entonces cuando los patriarcas animaron a sus hijos a desarrollar su talentos artísticos; y posteriormente se los presentaron a diferentes agentes de casting en Los Ángeles.
River destacó entre todos sus hermanos por su frescura y naturalidad. Siendo aún un adolescente se encargó de mantener a la familia con sus primeros sueldos, provenientes de pequeñas apariciones en largometrajes y comerciales.
Se encontraron por primera vez en el rodaje de Dulce hogar… ¡a veces! (1989), que protagonizaba el protagonista de Joker y hermano de River, Joaquin. Keanu y River se encontraron en el plató siendo muy jóvenes. El primero tenía 25 años y el segundo 19. A pesar de la diferencia de edad, se hicieron inmediatamente muy amigos. Iban juntos al cine y hacían viajes en moto para acudir a conciertos. Incluso compartían gustos musicales y estéticos: ambos llevaban el pelo desaliñado, los pantalones rotos o la barba mal recortada. Los dos estaban muy comprometidos por los derechos de los animales. Además, eran especialmente celosos de su intimidad a la hora de realizar entrevistas.
En poco tiempo, la amistad se fue solidificando hasta que, un año después, se encontraron por primera vez en la gran pantalla. Fue en la película Te amaré hasta que te mate (1990): una comedia norteamericana de humor negro dirigida por Lawrence Kasdan. Phoneix y Reeves comenzaban a rozar el éxito. El primero, junto a Harrison Ford en Indiana Jones y la última cruzada. El segundo, a raíz del taquillazo Le llamaban Bodhi (1991). En una entrevista para la revista Esquire, Reeves contaba que “para él, River siempre había sido como un hermano mayor”. Incluso fue el agente de éste el que le consiguió el papel para el salto definitivo hacia la fama. “Lo haré si tú lo haces”,
Mi Idaho privado cuenta la historia de Mike Waters (Phoenix) y Scott Favor (Reeves), dos prostitutos jóvenes que se ganan la vida en las calles de Portland. La complicidad de ambos en la pantalla fue tal que comenzaron a desatarse rumores de que en la vida actual eran pareja. Ninguno se encargó de desmentir dichos comentarios.
” Fuentes www.revistavanityfair.es ”