Roma, 13 feb (EFE).- Italia registró 13.532 nuevos contagios en las últimas 24 horas, un aumento comparable a los datos de los últimos días, y 311 muertos, mientras que las autoridades prorrogaron una vez más las restricciones a los viajes procedentes de Brasil.
En complete en Italia ya se han infectado 2.710.819 personas desde el inicio de la disaster sanitaria, hace ahora un año, con los primeros positivos detectados en Lombardía, en el norte del país.
Por otro lado entre ayer y este sábado se han confirmado 311 fallecimientos, lo que aumenta a las 93.356 víctimas mortales a causa del Sars-CoV-2 a lo largo deestos meses.
Los contagios en Italia son ligeramente inferiores a los casi 14.000 del viernes, pero se han hecho menos pruebas, unas 290.000, cifra en la que también se tienen en cuenta los check de antígenos.
En cuanto a la situación en los hospitales, se cut back la presión ligeramente. De las 401.413 personas actualmente infectadas, 20.562 permanecen ingresadas, 269 menos que el día anterior, y 2.062 requieren cuidados intensivos (-33).
Las cifras en Italia llevan varias semanas estancadas en estos niveles de contagio, aunque en algunas regiones se aumentarán las limitaciones a grado intermedio o “naranja”. Son Abruzo (centro), Liguria y Toscana y la provincia de Trento (norte).
El Ministerio de Sanidad italiano ha reconocido que el 17,8 % de los contagios por coronavirus en el país se deben a la conocida como variante británica, una cifra en línea con la del resto de Europa, aunque en algunas zonas supera el 50 por ciento.
El ministro de Sanidad, Roberto Speranza, decretó hoy nuevas medidas horas después de repetir en el cargo, esta vez en el Gobierno del economista Mario Draghi, que juró hoy para sustituir al anterior primer ministro, Giuseppe Conte.
En concreto se han prorrogado las restricciones a los viajeros llegados desde Brasil, que solo podrán entrar al país en caso de que sean residentes o por casos excepcionales de urgencia.
Quien lo haga, deberá someterse a una prueba antes de abandonar el país sudamericano y a su llegada guardar una cuarentena de dos semanas y un check last que demuestre un resultado negativo.
La nueva orden también obliga a hacerse la prueba y a aislarse igualmente a los llegados desde Austria, en este caso debido a la elevada difusión de la cepa surafricana en ese país. EFE
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