Trek Travel es uno de los principales touroperadores dedicados al cicloturismo del mundo. Vende exclusividad y experiencias únicas. Y eso es lo que ha preparado para una veintena de estadounidenses que desean cruzar el Atlántico para ver la salida del Tour de Francia en Bilbao y, de paso, darse una vuelta en bicicleta por Euskadi, en esos primeros días de julio. Un viaje de seis jornadas a un coste al alcance de muy pocos bolsillos: desde 8.500 euros, una tarifa que no incluye los vuelos ni tampoco algunas comidas.
A cambio, la compañía Trek Travel, división de turismo del conocido fabricante de bicicletas del mismo nombre, ofrece cinco noches en los hoteles de cinco estrellas Radisson (en Bilbao) y María Cristina (San Sebastián), un servicio de guías especializados, una cena con Eneko Atxa, seguir el final de la etapa de la capital vizcaína en un autobús descubierto aparcado en «un lugar estratégico», subir Jaizkibel «como un pro» detrás de un coche oficial del Tour, sacarse una fotografía de recuerdo en el podio de la carrera y el añadido de visitar al equipo profesional Trek-Segafredo mientras se prepara para afrontar la jornada del día. Todo ello a lomos de una de las bicis más exclusivas de la marca: la Trek Domane 7 SL Disc, un modelo que en el mercado ronda los 6.000 euros (se incluye un cheque con un descuento de 500 dólares por si el turista queda prendado de la montura y desea comprarla).
«El País Vasco es un destino fantástico para la bicicleta», explica Jake Fergus, director de Marketing de Trek Travel. «Y lo más increíble es que todavía no es suficientemente conocido en Estados Unidos», añade. La división de viajes de la conocida marca americana lleva desde septiembre preparando este viaje, gracias al trabajo de una decena de personas. «Una de las cosas que nos ha resultado más difícil es encontrar hoteles de cuatro o cinco estrellas que sean amigables para el ciclista, que permitan estacionar las bicis en un entorno seguro y que no estén muy lejos del centro». En esta tarea han contado con la colaboración del Radisson.
«El País Vasco es un destino fantástico para la bicicleta», explica Jake Fergus, director de Marketing de Trek Travel. «Y lo más increíble es que todavía no es suficientemente conocido en Estados Unidos», añade. La división de viajes de la conocida marca americana lleva desde septiembre preparando este viaje, gracias al trabajo de una decena de personas. «Una de las cosas que nos ha resultado más difícil es encontrar hoteles de cuatro o cinco estrellas que sean amigables para el ciclista, que permitan estacionar las bicis en un entorno seguro y que no estén muy lejos del centro». En esta tarea han contado con la colaboración del Radisson.
En su primer día, los veinte participantes en esta experiencia recorrerán en bici los montes que rodean Bilbao para, al día siguiente, hacer un bucle por la costa vizcaína, recorriendo algunos de los puntos por donde pasará la etapa de la ronda gala. El remate del viaje les llevará a Gipuzkoa. Serán cinco jornadas de ciclismo con recorridos no demasiado exigentes: de entre 30 y 60 kilómetros, con desniveles que oscilarán entre los 500 y los 1.100 metros.
Tres empresas en Bizkaia
Posiblemente, Trek Travel no será la única empresa internacional que traiga a turistas amantes de la bicicleta y de alto poder adquisitivo a Bilbao. Este sector comienza a dar sus primeros pasos en Bizkaia, donde también hay asentadas varias empresas especializadas en guiar a viajeros que desean conocer el entorno a pedales, como Bizkairoute, Horizontes o Bizi Cycle Tours.
El Gobierno vasco, a través de Basquetour está haciendo un importante esfuerzo en los últimos años para atraer al cicloturista, un viajero que es muy bien acogido porque recorre comarcas que están fuera de los circuitos turísticos habituales, tiene normalmente un alto nivel de gasto y nos visita en temporada baja o en momentos donde la ocupación hotelera no es muy alta (de lunes a viernes).
” Fuentes www.elcorreo.com ”
