Cómo el agotamiento me llevó a dejar mi trabajo: Una historia de salud mental en McKinsey
En un mundo donde la presión laboral se ha convertido en la norma, contar mi historia de agotamiento y su impacto en mi carrera puede ayudar a generar conciencia sobre la importancia de cuidar nuestra salud mental en el trabajo. Aunque no quiero añadir más drama al tema, considero fundamental compartir mi experiencia en McKinsey & Company.
Hace unos años, me encontraba completamente inmerso en mi carrera en una de las consultoras más prestigiosas del mundo. Mi agenda estaba repleta de reuniones, presentaciones y viajes constantes. Cada día enfrentaba nuevos desafíos y tenía que superar altas expectativas. Lamentablemente, esta rutina extenuante empezó a cobrar su peaje en mi bienestar emocional y físico.
Los primeros síntomas fueron sutiles. Experimentaba fatiga constante y problemas para conciliar el sueño. No obstante, me esforcé por ignorar estos signos y seguir adelante. Pensaba que era simplemente parte del juego, que con el tiempo me adaptaría y me volvería más resistente. Pero estaba equivocado.
A medida que el agotamiento empezó a tomar control sobre mí, mi rendimiento comenzó a resentirse. Mi capacidad para concentrarme disminuyó, y mi creatividad se vio afectada negativamente. Mi cuerpo me pedía a gritos un descanso, pero yo seguía empujándome más y más.
Finalmente, llegó el día en que no pude ignorarlo más. Me encontraba en una reunión crucial para un importante proyecto cuando tuve un ataque de pánico. Sentí como si me faltara el aire y mi corazón latía descontroladamente. Fue entonces cuando me di cuenta de que había llegado a un punto de no retorno.
Después de ese episodio, supe que tenía que tomar una decisión drástica para proteger mi salud mental. Aunque resignar mi puesto en McKinsey fue una elección difícil, entendí que mi bienestar era mi prioridad.
Enfrenté críticas y palabras de desaliento al dejar mi empleo. Muchos me tacharon de “débil” o “poco comprometido”. Sin embargo, la verdad es que reconocer mi situación y buscar ayuda fue el acto más valiente que he realizado en mi vida.
Afortunadamente, el apoyo de mi familia, amigos y terapeuta fue fundamental en mi proceso de recuperación. Aprendí a establecer límites saludables, a priorizar mi bienestar y a redefinir el éxito de una manera más equilibrada.
Hoy, mi vida ha cambiado radicalmente. Aunque a veces siento nostalgia por la adrenalina del mundo corporativo, entiendo que mi salud mental es más importante que cualquier título o posición.
Si hay algo que quisiera transmitir con mi historia, es la importancia de escuchar a nuestro cuerpo y mente. Ignorar las señales de agotamiento y sobrepasar nuestros límites solo nos lleva a un destino oscuro. No tengas miedo de buscar ayuda y tomar decisiones que te permitan cuidar de ti mismo.
Mi desafío será siempre mantener el equilibrio entre mis aspiraciones profesionales y mi bienestar. Pero estoy comprometido a no permitir que el agotamiento me domine nuevamente. Y tú, ¿qué estás dispuesto a hacer por tu salud mental?
” Sources www.businessinsider.es ”