LA PRENSA Premium identificó cómo redes de trata utilizan spa, hoteles, salones de belleza y hasta supuestas clínicas de estética
Casas de masaje
San Pedro Sula, Honduras.
“Te consentimos como te lo mereces”, “no esperes y ven por un masaje con hermosas chicas que te atenderán gustosamente”, “solo para caballeros del buen gusto, discretos y educados”. Estas y otras promociones eróticas proliferan en distintos portales internet y redes sociales.
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Se trata de un servicio en el cual buscan captar la mayor cantidad de clientes posibles a través de un supuesto masaje, que en realidad no es más que un acto de prostitución, donde múltiples mujeres con físico atractivo son ofrecidas como “carne fresca” para momentos de placer.
En Fb, por ejemplo, perfiles falsos colocan números telefónicos para que hombres se comuniquen y soliciten masajes. Estos varían entre 300 a 500 lempiras. En Instagram, Twitter y Snapchat también proliferan estos avisos.
Mientras que en Tik Tok, la plataforma de moda y preferida por los jóvenes en este momento, perfiles como Spa y salón seducción, con el lema “El mejor lugar para relajarte”, ofrece masajes con los mejores aceites minerales supuestamente traídos desde Israel, con paquetes que incluyen masajes dántricos, terapeúticos en todo el cuerpo, sobre camas de bambú, con sauna en bañera y, por supuesto, eróticos.
En sitios internet como Evisoshn, Clasihn, Wanuncios.com se anuncian mujeres con vestimenta sensual, publican los presuntos datos personales y servicios que ofertan para captar la atención de los visitantes.
La Unidad de Investigación de LA PRENSA Premium realizó conexiones reales para conocer de cerca cómo operan estas redes que funcionan en el país sin regulación alguna. Uno de los ejercicios consistió en comunicarse por WhatsApp con personas de este rubro y se simuló que una mujer de hermoso físico, desesperada por falta de oportunidades, buscaba empleo en San Pedro Sula. A continuación detallamos el diálogo:
LA PRENSA (LP): Buenas, les escribe M. E., miré que tienen trabajo como masajista, quiero decirles que tengo experiencia porque saqué unos cursos, por favor les pido una oportunidad.
Centro de masajes (CM): Aquí no son masajes profesionales, usted con que pueda hacer está bien, pero por el masaje no se gana, solo si ofrece servicios sexuales son sus ganancias. Si está de acuerdo le puedo hacer una entrevista para que comience el próximo lunes.
LP: No importa, lo que quiero es un poco de ingresos porque realmente sí necesito el trabajo.
CM: Okay, necesito ver fotos de cómo es.
LP: Está bien (se le envió una imagen ficticia).
CM: ¿Usted es ella? ¿dónde ha trabajado?
LP: He trabajado como vendedora y recepcionista en tiendas.
CM: Entiendo, pero como le explico, aquí es servicios sexuales. Si le interesa, amor, le puedo hacer una entrevista el sábado y comienza el lunes. Tráigase la cédula, buena presentación, venga regular y bonita y cuando comience entonces sí ya se trae algo más sexi. Seguidamente se cortó la conversación.
En otro de los casos se solicitó el servicio a través de contactos difundidos en Tik Tok. Se comparte a continuación el intercambio de mensajes:
LP: Hola, quiero los servicios.
Spa: Le tenemos masaje corporal sobre camilla a 800 lempiras y dura 50 minutos (este paquete le llaman especial). También sauna de baño de vapor húmedo en todo el cuerpo y acompañado de una chica en ropa inside, además de masaje corporal. Dura 1 hora con 20 minutos y el precio es de 1,500 lempiras (paquete de edecán VIP). De igual manera hay baño a vapor húmedo, acompañado de una mujer desnuda, masaje erótico trántico durante 2 horas, el precio es de 2,000 lempiras (paquete platinum, el más costoso).
LP: Estoy en San Pedro Sula.
Spa: ¿Qué servicio desea joven?, ¿para cuándo su cita y hora?”.
LP: Para el fin de semana.
Spa: Deme su nombre.
LP: G.M.
Spa: Le enviaré las opciones (envía 14 fotografías de catálogo con sensuales mujeres).
LP: Elijo a Claudia (mujer voluptuosa y de piel clara), y dónde están o cómo es el proceso.
Spa: Estamos en barrio Río de Piedras, atrás de… mientras que en Tegucigalpa estamos en… Concrete su cita haciendo reservación (billetera electrónica) y al número********, a nombre de ********* e identidad número*****. Cuando haga su depósito envíe foto del recibo y su nombre como comprobante, todos los servicios incluyen habitación climatizada, parqueo y seguridad”. Allí se concluyó la conversación entre las partes.
Un tercer ensayo fue mediante Tinder, una aplicación de citas y encuentros. Una dama identificada solo como Mary colgó una fotografía sensual y un número telefónico para contactarla.
Al escribirle en WhatsApp relató que ella en realidad trabaja durante el día como cajera de una gasolinera en la colonia Guadalupe de San Pedro Sula, pero que durante la noche es dama de compañía, yendo únicamente a moteles y hoteles conocidos, con servicio de dos horas y a un precio de 1,300 lempiras, que incluye sexo completo.
Ante todo aclara que no acepta taxistas y que deben pasar por ella en vehículos particulares para su posterior traslado.
La facilidad para adquirir estos servicios y la imposibilidad de prohibirlos es enorme. Las redes sociales e Web son espacios donde navegan sin límites muchas personas. La explotación sexual desde hace mucho abandonó la clandestinidad e irrumpió en las nuevas tecnologías.
Queda claro que el océano digital casi desvaneció la prostitución callejera, la cual ahora solo es considerada marginal.
Las personas que trabajan en este mundo publican imágenes suyas para atraer nuevos clientes y mantener a los antiguos, pero también conectan con otros trabajadores sexuales, reproducen sus contenidos y aumentan su directorio mediante alianzas con fabricantes de lencería, fotografía y video.
Además, muchas usan sus perfiles para redirigir a sitios personales explícitos como OnlyFans. Aunque redes como Fb penalizan el contenido sexual y frecuentemente cierra cuentas, en plataformas como Twitter hay mayor libertad de difusión.
Con la explotación sexual de la nueva period también nacen términos, clientes y espacios, ya que aunque las esperas en orillas de aceras y bulevares en las frías noches aún siguen vigentes para una parte del mercado en los centros de las urbes, ha crecido la moda de conectar con clientes desde la comodidad de casa, con un Smartphone sobre la mano para vender amor, caricias y tiempo a cambio de dinero.
Las principales ciudades de explotación sexual en Honduras son San Pedro Sula y Tegucigalpa.
Según indagaciones de la División de Criminología y la Unidad Transnacional de Investigación Legal, de la Policía hondureña, los tratantes rentan casas en zonas exclusivas y residenciales, donde hay seguridad privada y circuito cerrado. Aquí los guardias están obligados a informar a sus habitantes quiénes son sus visitas.
En el caso de San Pedro Sula, colonias como la Trejo y Jardines del Valle han reportado en ocasiones pasadas desmantelamiento de casas de masaje. El último hecho registrado en la ciudad fue el 18 de noviembre de 2022, cuando la Agencia Técnica de Investigación Legal (Atic) allanó una lujosa casa en la colonia Trejo tras recibir denuncias que allí cometían trata de personas con fines sexuales.
Estas redes publican anuncios como “masaje a domicilio”, donde trasladan a la víctima para dar el servicio donde la citen, sea un motel conocido, resort o en la casa del cliente, siempre y cuando no sea en colonia o barrio inseguro.
Otros modus operandi de organizaciones son la renta de native en área comercial o edificio y rotulan con el nombre de Spa; sin embargo, no tienen permiso de operación ni las mujeres que hacen masajes han recibido preparación o estudio sobre cómo hacerlos. Otro centro de operaciones son las viviendas de tratantes, donde llevan a la víctima ante el cliente, quien la espera para recibir un servicio de masaje con “final feliz”. Una vez concertada la cita, el cliente lleva a la víctima donde se consumará el anhelado acto sexual.
” Fuentes www.laprensa.hn ”