Viajar. Nunca un verbo había sido pronunciado con tantas ganas. Entre las dos sílabas que forman una de las palabras más repetidas del año se han instalado también un cúmulo de emociones: incertidumbre, provocada por los asiduos cambios de requisitos de entrada en los destinos; frustración, motivada por el retorno de la gran duda (¿qué meto en la maleta?); euforia, cuyos niveles más altos se han registrado en esos segundos en los que el avión se disponía a despegar; alegría, generada por esos reencuentros tan ansiados; nostalgia, paliada por una escapada espontánea a aquel destino que marcó un antes y un después en nuestras vidas; calma, la que hemos encontrado en los rincones rurales más espectaculares de nuestra geografía; amor, el motor que mueve a nuestros alojamientos favoritos; y, en ocasiones, miedo, o más bien, falta de valentía para lanzarnos a hacer ese gran viaje, el que hace tiempo nos espera a más de cinco fronteras de casa.
Y, sobre todo, gratitud, sentimiento con el que revelamos hoy la Gold Listing 2022, la lista de los favoritos de Condé Nast Traveler del mundo del viaje, que este año llega con cambios: por primera vez, España y Portugal comparten protagonismo en las categorías habituales, mientras que el resto del mundo está representando por diez hoteles de cada continente.
Como siempre, eso sí, no podían faltar los hoteles urbanos más espectaculares, los resorts en los que bajar revoluciones es tarea sencilla, los lugares que nos han conquistado nuestras retinas con su diseño y los que han hecho lo propio con nuestro paladar en sus restaurantes.
Sin olvidarnos de todos esos templos dedicados a la salud, el deporte y el bienestar; de los paisajes más inspiradores de España; de las postales internacionales que nos hacen consultar las páginas de reservas de viajes día sí y día también; de los nuevos hoteles que hacen que volvamos con gusto a los destinos de siempre…
” Fuentes www.traveler.es ”