Los hoteles en España se preparan para una temporada alta inédita. El volumen de reservas que vienen cerrando desde Semana Santa ya se sitúa en niveles previos a la disaster, gracias al mayor management del coronavirus y a la demanda embalsada tras dos años sin viajes. Un apetito que puede incrementarse en las próximas semanas ante los problemas que está afrontando Turquía, el gran competidor de España para atraer turistas europeos a destinos de sol y playa el próximo verano.
El primer contratiempo ha sido afrontar la desaparición del 19% de sus viajeros internacionales como consecuencia de la invasión rusa en Ucrania. En 2019, Turquía recibió 45,1 millones de viajeros extranjeros, de los que 7 millones procedieron de Rusia y 1,5 millones de Ucrania. Esos 8,5 millones viajeros ya los han perdido y ahora están buscando mercados alternativos. Pero ahora, los hoteles turcos no pueden utilizar el gran reclamo que habían usado hasta el momento para convencer a alemanes y británicos (5 y 2,5 millones en 2019, otro 18% de los viajeros): unos precios muy inferiores a los de España, que solía duplicarlos o triplicarlos.
TUI, el mayor turoperador europeo, apostará por Grecia frente a Turquía
La espiral inflacionista ha acabado con esa ventaja competitiva. La subida media de los precios se situó en el 61% en marzo, el nivel más alto de los últimos veinte años, y eso ha provocado un alza de tarifas hoteleras inédita. Los últimos datos de la consultora estadounidense STR, especializada en el análisis de datos para la industria turística, apuntan a que el precio medio de la planta hotelera en Turquía se situó en marzo de 2022 en 82,1 euros por habitación, lo que supone más que duplicar los precios del mismo mes de 2021 (35,2 euros) y casi cuadruplicar los precios previos a la pandemia (24,5 euros).
Una subida que se visualiza mejor en la comparación con las tarifas españolas. En marzo de 2019, el precio medio de una habitación de resort en España (99 euros) cuadruplicaba al de Turquía (24,5 euros). Esa brecha se empezó a estrechar en 2020, se redujo a la mitad en 2021 (76,9 euros de España frente a 35,2 de Turquía) y se ha estrechado aún más en 2022 (107,6 de España frente a 82,1 de Turquía). Eso significa que si hace un año, los precios de los hoteles en España duplicaban a los de Turquía, ahora solo están un 24% por encima.
Fuentes empresariales recalcan que Turquía tiene las de perder en la comparación con España. “Los servicios, la seguridad y la oferta complementaria no tienen nada que ver. Además TUI, el mayor turoperador de Europa y el principal emisor de viajeros alemanes, ya ha remarcado en conversaciones privadas con agentes que la apuesta para este verano ya no será por Turquía, si no por Grecia”. Esas mismas fuentes remarcan, sin embargo, que las empresas están siendo especialmente cuidadosas con las subidas de precios, ya que la tolerancia de los mercados no es la misma. “Los turístas de Asia y América sí aceptan de mejor grado incrementos de precios, pero los europeos las rechazan”.
Las reservas se aceleran después de Semana Santa
El ritmo de reservas en las agencias de viajes se ha acelerado desde Semana Santa. “Aunque todavía vamos un 13% por debajo en comparación con 2019, la gente ha perdido el miedo a la pandemia y ha empezado a reservar. En las dos semanas posteriores a Semana Santa, las reservas crecieron un 51% respecto a las mismas fechas de 2019”, recalca Ricardo Fernandez, director basic de Destinia. En su opinión, los turistas españoles y europeos están perdiendo el miedo a viajar de nuevo. “Poco a poco estamos volviendo a la normalidad, principalmente gracias a la relajación de las restricciones, lo que está haciendo que se esté volviendo a viajar con menos miedo e ir recuperando la vida previa a la pandemia”.
” Fuentes cincodias.elpais.com ”