Viajar en moto es un placer. Pocas experiencias son capaces de transmitir tanto, de disfrutar del viaje de una forma tan intensa, de sentir cómo cala esa sensación adictiva de libertad. Como la vida misma, el mundo de la moto también evoluciona, evoluciona hacia una movilidad más sostenible y cuidadosa con el medio ambiente con las motos eléctricas como protagonistas. La mejora de la autonomía de estos vehículos y el paulatino crecimiento de la pink de recarga ha hecho que viajar en una moto eléctrica deje de ser una utopía para convertirse en realidad. El año pasado ya lo dejó patente Alicia Sornosa al irse de Madrid a Suiza con una Zero SR/F, una moto 100% eléctrica, y realizar parte de la eGran Ruta, la ruta para descubrir Suiza en vehículo eléctrico. Esta vez cambian los protagonistas y el escenario, pero la premisa es la misma: viajar en moto eléctrica sí se puede.
No hace falta irse a Suiza para disfrutar de una ruta pensada para los vehículos eléctricos. Ni tal solo se tiene que cruzar la frontera, bastará con dirigirse al norte, más concretamente al País Vasco. Allí han estrenado la e-Basque Route, la primera ruta turística a nivel nacional pensada para los vehículos eléctricos y con toda una serie de puntos de recarga eléctrica para recorrer Euskadi a lo largo de los 950 kilómetros que dan forma a la ruta. Ocho son los tramos diseñados pero no hace falta hacerlos todos, se puede hacer por etapas y según las preferencias de cada uno. En este caso se cubrieron los tres primeros, a saber, de Bilbao a Lekeitio, de Lekeitio a Zarautz y de Zarautz a San Sebastián, aunque la e-Basque Route sigue hacia Vitoria, Orduña…
Planificación
La diferencia entre viajar con una moto con motor a explosión o con una eléctrica es que esta última requiere más planificación. Con una moto eléctrica se debe tener en cuenta la autonomía, los puntos de recarga en ruta y los tiempos de carga. Existen diferentes aplicaciones para conocer la ubicación de los puntos de recarga, el tipo, la potencia e incluso dependiendo del proveedor se puede reservar. A partir de aquí es sencillo; incluso algunos calculan la mejor ruta en función del modelo del coche o de la moto.
Sobre un escenario como la e-Basque Route, motos como las Zero SR/S y SR/F ofrecen una autonomía por carretera de entre 160 y 190 kilómetros, recorrido que no se realiza del tirón por lo viradas de sus carreteras de manera que cuando se detiene a hacer una visita turística o a comer se puede aprovechar para recargar. En este sentido un cargador rápido permite cargar el 100% de la batería en una hora pero si se tiene en cuenta que nunca se llega con la batería a cero, el tiempo se scale back.
![Moto eléctrica](https://news.google.com/medio/2022/11/07/moto-electrica_271f7ff8_1200x800.jpg)
Las etapas de esta ruta por País Vasco son de unos 100 kilómetros y se invierte unas tres horas en recorrer cada una. Si se suma el tiempo de las paradas para visitar los puntos de interés y la comida se llega tranquilamente al resort a media tarde con las baterías de las Zero a un 40% de su capacidad. Será el momento de poner a cargar y que estén listas para la siguiente jornada. Porque la propia e-Basque Route cuenta con un listado de hoteles con puntos de recarga para poder planificar la ruta.
La otra gran diferencia de viajar en una moto eléctrica es la experiencia en sí: sin ruido del motor y sin calor del motor. Además, las Zero no tienen cambio de marchas de manera que bastará con acelerar y frenar para llevarlas. La facilidad de conducción va a permitir al conductor no estar tan pendiente del cambio de marchas y disfrutar más del paisaje y del entorno. En este sentido, estas motos cuentan con carga regenerativa, es decir, que cuando se ‘corta gas’ carga la batería a la vez que hace de freno motor. De la misma manera disponen de diferentes modos de conducción para adaptar el dinamismo de la moto a la situación en términos de potencia, velocidad máxima, management de tracción y otros parámetros.
La eRuta
De Bilbao a Lekeitio
La primera etapa, de 111 kms, arranca en Bilbao hacia Getxo pasando junto al Puente de Bizkaia y bordeando la costa por localidades como Sopelana donde cuentan los lugareños que se puede disfrutar de unas mejores puestas de sol del País Vasco. La parada en San Juan de Gaztelugatxe es obligatoria, aunque sea para hacer la foto desde el mirador de su iglesia y de la escalita que popularizó la serie televisiva Juego de Tronos. Siguiendo por Barrika pasa por Bakio, Bermeo y Mundaka. Tanto parar en Bermeo para pasear por su puerto como detenerse en Mundaka para respirar su ambiente surfero resulta más que recomendable, al igual que visitar la Casa de Juntas de Guernika y conocer parte de su historia. Las carreteras de Urdaibai, Reserva de la Biosfera, animan la ruta mientras que la bella localidad de Lekeitio marca el punto y ultimate de la primera etapa donde el resort Silken es la referencia obligada del lugar para poder recargar las baterías de las motos.
![Zero eBasque Route 2022 Fernández 20](https://news.google.com/medio/2022/11/07/zero-ebasque-route-2022-fernandez-20_9236efab_1200x799.jpg)
De Lekeitio a Zumaia
Ver como los primeros rayos del sol bañan la Isla de Garraitz en Lekeitio es la mejor manera de encarar la segunda etapa de la e-Basque Route. Con las motos cargadas durante la noche, Ondarroa y Mutriku son los primeros puntos de paso. De camino no deja de sorprender la facilidad de conducción de las Zero a pesar de sus altas prestaciones. Pero lo que más sorprende es el silencio solo roto por el zumbido del motor eléctrico al acerar con decisión.
Pueblos pesqueros como Mutriku y Deba tienen mucho encanto, al igual que Azpeitia donde la visita al Santuario de Loiola no defrauda. Construido alrededor de la casa natal de Ignacio de Loyola, el fundador de la Compañía de Jesús conocida como los Jesuitas, emerge como un complejo monumental y religioso digno de visitar. Igual de interesante, o más, es acercarse al Flysch de Zumaia y darse un paseo para admirar este fenómeno pure del Geoparque de la Costa Vasca, una formación geológica que permite estudiar la formación del planeta.
Tras el paseo, la ruta inicial de la e-Basque Route debería seguir hacia Guetaria y Zarautz pero en este caso el recorrido finalizó en la propia Zumaia, más concretamente en Jesuskoa, una casa rural construida el siglo XVII, y que cuenta con seis puntos de carga rápida, dos Tesla y cuatro Porsche; el paraíso del vehículo eléctrico, por no hablar de su apreciada gastronomía.
![Zero eBasque Route 2022 Fernández 55](https://news.google.com/medio/2022/11/07/zero-ebasque-route-2022-fernandez-55_ce2ffeb0_1200x799.jpg)
De Zumaia a San Sebastián
Con el silencio de las motos eléctrica como compañero de viaje, el recorrido de esta ecoruta sigue pasando por las emblemáticas Guetaria y Zarautz, tierra de txakolí y de grandes cocineros como Karlos Arguiñano, en cuya cafetería lo mismo se puede desayunar que comprar el pan o bollería “rica, rica”. La subida al monte Jaizkibel, escenario de carreras de montaña y eventos como el Wheels & Waves, es un regalo al manillar de una Zero con la que hilvanar una curva tras otra y disfrutar del paisaje. Round por Hondarribia y regresar por Pasaia es el preludio para finalizar este tercer día en San Sebastián. Pero los intrépidos viajeros al manillar de sus motos eléctricas no se quieren ir de País Vasco sin visitar una bodega de txakolí. Así es como acaban haciendo una cata de en Hiruzta Bodega en Hondarribia y despiden la ruta con un menú gastronómico al lado, en el Asador Sutan. Porque viajar en moto es un placer, como la gastronomía del País Vasco, más cuando ya después no tienes que conducir.
” Fuentes news.google.com ”