La Autoridad Portuaria de Barcelona intensificará en los próximos días su trabajo con las compañías crucerísticas con el objetivo de retomar la actividad del sector en las próximas semanas. La Generalitat de Catalunya ha aprobado el plan sectorial para la actividad de cruceros en los puertos catalanes, con protocolos sanitarios que se deberán seguir cuando los buques amarren. Se trata de unos protocolos en los que tanto el puerto como las navieras han trabajado en los últimos meses y que inicia la cuenta atrás para la vuelta de los cruceros este verano. “Después de meses de espera, consideramos que la aprobación de los protocolos sanitarios de Procicat una excelente noticia”, ha valorado la presidenta de la Autoridad Portuaria de Barcelona, Mercè Conesa. No obstante, de momento se podrían realizar exclusivamente cruceros de cabotaje, pues el Gobierno de España aún no ha autorizado la operativa de cruceros internacionales desde Barcelona.
Por otra parte, el puerto ha señalado que “aún es pronto para fijar una fecha concreta de inicio de actividad”, pues “los cruceros necesitan algunas semanas de anticipación para estar en condiciones óptimas de operatividad, tanto para reposicionar los buques en los puertos de inicio del recorrido como para preparar el propio buque y la tripulación”. Sin embargo, la autorización recibida permitirá a los actores involucrados trabajar “con objetivos claros de retorno”.
“Después de meses de espera, la aprobación de los protocolos sanitarios es una excelente noticia”
Mercè Conesa Presidenta de la Autoridad Portuaria de Barcelona
La presidenta del enclave portuario, Mercè Conesa, ha remarcado que la vuelta de la operativa “se realizará de forma totalmente segura” y ha recordado que “llevamos muchos meses trabajando con las navieras para poder ofrecer a la ciudadanía una vuelta de los cruceros con garantías, cumpliendo con estrictos protocolos sanitarios diseñados por profesionales internacionales especializados”. En este sentido, también ha manifestado que “estos protocolos no solo están pensados para los pasajeros y las tripulaciones de buques, sino que también quiere proteger de forma efectiva a los ciudadanos de las destinaciones”.
La actividad del sector crucerístico se encuentra paralizada desde el inicio del estado de alarma, a mediados de 2020. En este sentido, el puerto catalán ha asegurado que este tiempo “no solo ha permitido trabajar en el retorno post-pandemia, sino también evaluar las externalidades de esta actividad en las ciudades de destinación y trabajar en su minimización, para conseguir un turismo de cruceros más sostenible, tanto a nivel medioambiental como económico y social”.
” Fuentes elmercantil.com ”