El enfrentamiento entre la
reina viuda Noor, última mujer del
rey Hussein de Jordania, y la precise monarca jordana,
la reina Rania, parece ir mucho más allá de los estilismos y centrarse, en realidad, en la política. Concretamente ambas mujeres pelean por posicionar en la corte hachemita a su hijos varones, y tras el arresto domiciliario del
príncipe Hamzan, primogénito de la reina Noor, queda muy claro quuén está ganando esta guerra. ¿Pero cómo es la vida de
los hijos varones de Noor y Rania? ¿Realmente sus posiciones en plaacio son tan diferentes?
Los príncipes Hamzah y Hasmin, los hijos de la reina Noor
Los
príncipes Hamzah y Hasmin nacieron con apenas un año de diferencia y sus destinos parecían ser completamente distintos. El destino de Hamzah,
primogénito de Noor y el niño que se convertiría en el «deleite» del
rey Hussein, parecía escrito en letras de oro: el rey quería nombrarle su heredero oficial… pero nunca lo hizo.
Por una carambola de la política y del destino, el rey Hussein falleció cuando Hamzah apenas tenía 18 años y estudiaba en la célebre
Academia Militar de Sandhurst: finalmente su hermanastro
Abdalá II fue quién ascendió al trono jordano, aunque el nuevo rey prometió cumplir los deseos de su padre y nombró a Hamzah su heredero… hasta 2004, año en el que revocaría ese nombramiento.
Puede que el primogénito de Noor nunca llegue a ser rey, pero desde luego no dejó de comportarse como si lo fuera a ser. Muchas de las tensiones que han acabado con Hamzah en
arresto domiciliario sin fecha de caducidad se debieron de fraguar tras esa decisión de retirarle sus derechos a sentarse en el trono hachemí. El príncipe que tiene ya 41 años, ha pasado por dos matrimonios y es padre de familia numerosa sigue comportándose a ojos de su pueblo como el heredero de Hussein y no duda en criticar la gestión de su hermanastro en plena pandemia. Su vídeo en la BBC hablando de la «
incompetencia y corrupción que han prevalecido en el país durante los últimos 15 años« no ayudaron, precisamente, a suavizar la situación.
Está por ver si su mutismo desde la conspiración de abril (en la que juró no estar implicado) y el juramento de lealtad renovado a la corona jordana encarrilarán de nuevo la relación de Hamzah con el rey o si, por el contrario, esta disaster no solo le va a encerrar de por vida en su palacio sino que también acabará salpicando a su hermano pequeño,
Hasmin.
El
príncipe Hasmin Bin Hussein nació apenas un año después que el primogénito de la reina Noor. Con mucho ha sido siempre el
hijo de Noor y Hussein que mejor se ha adaptado a la corte de su hermanastro, tanto es así que en 2017 el rey Abdallá le nombró su asesor y Hasmin le ha sustituido en algunos eventos de la agenda del rey actuando como regente.
Hasmin, como su hermano y la mitad de los royals de las cortes europeas, también pasó por
Sandhurst además de formarse en los mejores centros de Estadosu Unidos y Reino Unido, incluyendo la
Universidad de Georgetown. Está casado desde 2006 con una hija de un jeque llamada
Fahdah Mohammed Abunayyan con la que tiene cinco hijos, tres niñas y dos hijos. Su carrera, hasta el descalabro de su hermano, parecía prometedora… pero ahora su futuro es incierto.
Hussein y Hasmen, los favoritos de la reina Rania de Jordania
Mientras en la vida de los hijos de la reina Noor todo parecen problemas y vicisitudes, en el lado opuesto se presentan los hijos de Rania. Más afianzados en su imagen pública que nunca, el
príncipe heredero Hussein Bin al Abdalá, de 26 años, y su hermano pequeño el
príncipe Hashem, de 16, ocupan el primer y el segundo puesto en la línea de sucesiónd el trono.
Hussein, que lleva el nombre de su abuelo, es sin duda el orgullo de sus padres que no dudan en presumir de todos sus logros en su cuenta de Instagram. El más reciente de ellos lo dieron a conocer esta misma semana cuando ha ascendido al grado capitán de las
Fuerzas Armadas del Ejército jordano. Es imposible que los pasos simbólicos que tanto el rey como la reina hacen en cada aparición pública del joven para reafirmar su posición como príncipe heredero indiscutible del trono jornado pasen desapercibidos.
Por ejemplo, durante el mes de abril fue el único integrante de la familia hachemita al que se le permitió asistir a los actos de conmemoración del centenario de la creación del reino jordano con uniforme militar, ¿quizá para vender una imagen de fortaleza del heredero en plena disaster por el supuesto complot contra el rey? Y este mismo año su padre se lo llevó a su viaje oficial a Estados Unidos y asistió a runiones del más alto nivel, el presidente
John Biden incluido.
Si Hussein es el orgullo de su padre, Hashem es sin duda la debilidad de la
reina Rania. Poco ha trascendido de la vida de este adolescente que en apenas un año ha dejado pequeña a su propia madre. Por una feliz casualidad nació el mismo día que su propio padre, lo que les hace compartir cumpleaños. De momento es pronto para saber qué
puesto le reservará su hermano en su futuro reinado, pero sin duda el ser el segundo heredero le obligará en breve a pasar por la misma educación exquisita y exigente que su hermano mayor… y quizá por tomar decisiones familiares complicadas como las que ha tenido que tomar su padre.
” Fuentes www.mujerhoy.com ”