En 2020, tras 16 años de crecimiento consecutivo, el sector aéreo en América Latina retrocedió un 59.2 % como producto de las restricciones por el COVID-19 que afectaron de forma contundente al sector de viajes y turismo.
El mismo sector que en el 2019 contribuyó con el 10.3 % del PIB mundial y que llegó a generar uno de cada cuatro de los nuevos empleos del mundo.
En América Latina este sector registraba un crecimiento de entre 4 y 5 %, y movilizaba alrededor de 24 millones de pasajeros, medidos a través del issue de ocupación (la cantidad de personas que transporta un avión) cercano al 80 %.(1)
Hoy, con un panorama más alentador, al mismo tiempo que el mundo avanza en el plan de vacunación, este sector comienza su recuperación.
México encabeza la reactivación en la región con un aumento del 73,8 % de su tráfico, seguido por Brasil, con un 69 %, y Argentina con un 19,2 %, según datos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).(2)
Aunque la tasa de recuperación varía de país a país, hay un punto en común: los pasajeros habituales ya extrañan subir de nuevo a un avión y vivir una experiencia de viaje memorable, incluso mejor que en el pasado.
Aunque no es seen para el pasajero, en un aeropuerto existe una infraestructura y un ecosistema de tecnologías que permite que los diversos grupos de trabajo (operacionales, tripulación, servicios generales, entre otros) se comuniquen sin importar en donde estén o a través de qué dispositivo lo hagan.
¿Qué tal si todas esas tecnologías convergen en un ecosistema realmente integrado de voz, knowledge, video y analítica?
Las cámaras ubicadas en puntos estratégicos del aeropuerto, potenciadas por inteligencia synthetic, generan alarmas ante hechos fuera de lo común y en ambientes de alto tráfico, tienen sensores que indican, por ejemplo, la presencia de personas con temperatura elevada, verifican la distancia social y velan por el uso correcto de la máscara facial.
Todo ello se convierte en información que puede ser analizada en tiempo actual desde el centro de management y monitoreo, desde donde se procesa y se envía la información situacional completa del acontecimiento (imagen, voz, datos) a los radios digitales de dos vías de los agentes de seguridad o a los empleados más cercanos al hecho.
Todos los datos llegan al Centro de Management y Despacho, en donde se puede construir una situación 360° de lo que está ocurriendo en distintas partes de cada terminal.
Esto permite una mayor agilidad en el análisis y respuesta y, al mismo tiempo, administrar todos los recursos disponibles.
En función de los datos recopilados a través de plataformas con GPS es posible saber quién está disponible y el lugar exacto en el que están las personas involucradas.
Se puede monitorear, por ejemplo, la ubicación de sillas de ruedas, que apoyan a pasajeros con necesidades especiales o médicas, máquinas como lavadoras de piso y movimiento de private en la plataforma de la aeronave, así como aeronaves en tierra.
Así, mediante el uso de evidencia registrada en video de alta calidad y herramientas como la búsqueda por apariencia y el reconocimiento facial es posible determinar todas las instancias de contacto que una persona específica tuvo durante su paso por un lugar determinado y, en consecuencia, tomar las acciones más efectivas orientadas a la contención.
Al mismo tiempo, los movies analíticos con autoaprendizaje detectan los movimientos sospechosos y notifican a los operadores sobre eventos que pueden necesitar mayor investigación como la presencia de intrusos en áreas restringidas en un pasillo.
Las comunicaciones de sala de management integradas al ecosistema agilizan la respuesta ante una emergencia por parte de los equipos propios del aeropuerto, bomberos y servicios de rescate.
El private de seguridad pública, trabajadores de aeropuerto y organizaciones complementarias están interconectados en una sola plataforma con canales de comunicación de de banda ancha que utiliza smartphones, computadoras, otros radios o teléfonos desde prácticamente cualquier ubicación.
Esto hace posible que tanto el private de rampa y equipaje hasta los grupos de trabajo externos, como los de servicios de limpieza, puedan responder a distintas situaciones antes de que ocurran o se agraven.
Aunque pareciera que la pandemia detuvo el reloj, la innovación no se detuvo y hoy es posible integrar dos soluciones que siempre fueron complementarias pero que no podían comunicarse entre sí.
A través de la solución Radio Alert los radios digitales de hoy pueden interoperar con soluciones de video, haciendo posible un ecosistema de tecnología realmente integrado que permite reconocer eventos importantes, anticipar acciones y ayudar a prevenir situaciones antes de que sucedan.
Todo esto genera una mejor experiencia dentro del aeropuerto que se traduce en operaciones eficientes, logística confiable con mayor seguridad y protección para los pasajeros en tránsito y empleados.
Después de todo, un aeropuerto es la primera y última impresión que tiene el viajero de una ciudad, región e incluso país.
(1) Carbone, F. (18 abril, 2020). En 2020 el negocio aéreo en América latina se reducirá a la mitad. Recuperado de: https://tradenews.com.ar/en-2020-negocio-aereo-en-latam-se-reducira-a-la-mitad/
(2) Sena, G. (7 febrero, 2020). TOP 25 de los aeropuertos con mayor movimiento de Latinoamérica. Recuperado de: https://www.aviacionline.com/2020/02/ranking-top-25-de-los-aeropuertos-con-mayor-movimiento-de-latinoamerica/
” Fuentes www.tecnoseguro.com ”