En una época en la que viajar está muy complicado por las restricciones destinadas a acabar con la covid-19, la televisión se convierte en esa ventana del avión que permite a los espectadores volar desde el salón a lugares, quizá, desconocidos para el gran público.
Todos los domingos, La 2 lleva a sus espectadores de viaje en una ruta por el océano Atlántico, comandada por Daniel Landa (Palencia, 1974). Un trayecto televisivo, que también ha sufrido la irrupción del SARS-CoV-2.
La pandemia les obligó a regresar a un Madrid confinado, aunque con la esperanza de volver a hacer la maleta y retomar la aventura atlántica. Un sueño cumplido, puesto que el equipo se encuentra ahora de nuevo en África y ha retomado el rodaje de la segunda parte de la serie, «en un momento en el que viajar por ese continente es todo un desafío», señala RTVE.
Pistoletazo de salida gallego
Una expedición formada por Camila Rodríguez, Tato de la Rosa, Vinsen Modino y el periodista de viajes Daniel Landa se acerca a algunas tradiciones insólitas, desde la Rapa das Bestas en Galicia a la romería de El Rocío en Andalucía.
Una aventura que arrancó en Finisterre (Galicia) y que este fin de semana visita un auténtico paisaje idílico en pleno océano Atlántico: el archipiélago de las Azores (Portugal).
Un episodio donde el equipo comandado por Landa se acerca a sus gentes, siguiendo el rumbo de los cachalotes, adentrándose en tierras volcánicas o «descendiendo cascadas de más de cien metros de altura».
Antes de llegar al continente africano, Atlántico también rinde visita a las Islas Canarias que mostrará a los espectadores la diversidad de estas islas desde el paisaje lunar de Lanzarote al mar de nubes de La Palma.
Desde Marruecos hasta Benin
El viaje por el Atlántico alcanza su esplendor en África, cuya costa oeste está bañada por este océano. Marruecos es la puerta de entrada por donde la serie documental recorrerá el laberinto de las medinas o los paisajes nevados del Atlas, ambas etapas, eso sí, son el preámbulo de la larga travesía por el desierto.
” Fuentes www.elcorreo.com ”