El comité ejecutivo del Plan de Emergencias de Protección Civil de Cataluña (Procicat) ha validado el procedimiento que deberán seguir las navieras para que se autorice la actividad turística de cruceros con bandera europea entre puertos situados en la comunidad, según han informado fuentes del Govern.
Para hacer posible que los cruceros puedan volver a Cataluña este verano, las navieras deberán presentar a la Secretaría de Salud Pública una solicitud de aceptación del protocolo de actuación y una notificación que se deberá seguir para el desembarco de casos sospechosos o confirmados de COVID-19 y la gestión de contactos en su ámbito territorial.
Lo tendrán que hacer con 20 días de antelación a comenzar el crucero o la primera escala, y la Secretaría de Salud Pública deberá responder esta solicitud en un máximo de cinco días.
En la solicitud, que está disponible en la net de la Agencia de Salud Pública de Cataluña, las navieras deberán exponer la actividad que hará el crucero, informando del itinerario detallado, incluidas las fechas y los puertos del litoral catalán donde se harán escalas, del programa de actividades de los pasajeros y de las características del propio barco (capacidad máxima de pasajeros, número de pasajeros y tripulantes con quien pretende operar en Cataluña).
Además, la naviera deberá presentar un plan de salud para prevenir y mitigar riesgos sanitarios derivados de la COVID-19, en el que se describirán los medios sanitarios con que contará el barco y la capacidad de diagnóstico a bordo mediante tipos de pruebas diagnósticas de infección activa.
Un crucero a vela, en el puerto de Roses. Foto: Ports de la Generalitat
Este plan también establecerá los aforos previstos según espacios, lugares y servicios, comunes o camarotes, los elementos de señalización e información a los usuarios y a la tripulación sobre medidas a seguir, las medidas de higiene en el barco, los planes de limpieza, desinfección y ventilación y los circuitos para minimizar contactos entre tripulación y pasajeros.
El agente crucerista también deberá presentar una declaración responsable en la que indique: el centro sanitario concertado por la naviera para atender pacientes de COVID-19 y para derivar casos sospechosos; un plan de alojamiento concertado para pacientes asintomáticos o que no requieran ingreso hospitalario; y un plan de alojamiento para los contactos estrechos que tengan que pasar cuarentena en caso necesario, antes de la vuelta a su domicilio o en el barco.
También deberán tener contratado un seguro que cubra todos los gastos que se originan en los centros concertados, tanto sanitarios, como alojamientos, por casos de covid. Ver también
Imagen de archivo de un crucero atracado en Palamós. Foto: Ports de la Generalitat.
Valoración de CLIA
Por su parte, la asociación de compañías de cruceros CLIA ha valorado “de forma muy positiva” que la Generalitat haya publicado el nuevo procedimiento sanitario que regula la actividad turística de cruceros con bandera europea en los puertos catalanes.
“Con esta iniciativa, Cataluña se suma a otros territorios del estado español que han obtenido luz verde para que se pueda operar en sus puertos. La comunidad canaria definió sus pautas sanitarias para el desarrollo de cruceros nacionales el pasado mes de noviembre y, hasta la fecha, unos 80.000 turistas han podido disfrutar de itinerarios entre las islas sin incidentes. A Canarias le han seguido recientemente Andalucía, Murcia y la Comunidad Valenciana“, explica CLIA.
“Queremos agradecer la colaboración de las autoridades portuarias y la confianza de los responsables de salud de estos territorios que han depositado en nuestros estrictos protocolos sanitarios que, creemos, son los más exigentes de la industria turística”, añade la asociación de compañías de cruceros.
Por todo ello, concluye CLIA, “entendemos que este anuncio hace aún más perentorio que el Gobierno Español reactive los cruceros internacionales eliminando la prohibición en vigor desde marzo 2020 que supone una anomalía respecto a otros países de nuestro entorno y un agravio respecto a otras formas de transporte; y evitando así que se continúe perdiendo competitividad respecto a otros destinos europeos que hace tiempo ya regularon la materia”.
Una de las fórmulas que han aplicado las navieras para volver a operar, evitando la prohibición de escalas de cruceros internacionales en los puertos españoles, es llevar a cabo “cruceros burbuja” con itinerarios de cabotaje. Es decir, una navegación entre diversos lugares del territorio de un estado, sin abandonarlo. En España, esta posibilidad solo se ha puesto en práctica en las Canarias.
” Fuentes www.hosteltur.com ”