Basta con moverse un poco por las redes sociales para comprender que uno de los principales anhelos de las personas es recuperar su libertad de movimientos. Sin embargo, el deseo de viajar se combina ahora con el objetivo de estar al aire libre tanto como sea posible, lejos de destinos concurridos y con la máxima seguridad sanitaria. Además de los yates y las mansiones de ensueño, hay una opción que está escalando posiciones entre las de un turismo pospandémico: el caravaning.
Este sector, que incluye caravanas, autocaravanas y camper (furgonetas transformadas como una autocaravana), ha sido uno de los pocos, dentro de viajes y ocio, que no ha sufrido consecuencias dramáticas en el último año. O, al menos, uno de los pocos en resistir y reaccionar. En España, 2020 ha cerrado con unas nuevas matriculaciones solo ligeramente inferiores a las del 2019, tras una década de verdadero increase.
El inside de un modelo Lotus Hollywood, con la funcionalidad y los acabados de un yate de lujo
De hecho, este tipo de solución responde perfectamente a dos de los mantras más escuchados en los últimos meses: flexibilidad y seguridad. Dos características que han convencido hasta a los más escépticos. Otra ventaja es que la vida en tenting se ha puesto de moda: hay menos resistencias y estereotipos hacia lo que hasta hace unos años, al menos en España, se consideraban unas vacaciones de nómadas, aptas para personas de bajo poder adquisitivo.
En la última década, sin embargo, la tendencia a abrir blogs o cuentas en las redes sociales donde compartir experiencias de viaje en estas casas móviles se ha extendido entre los millennials y la generación Y. El fenómeno ha ganado popularidad y la vida del vanlifer en poco tiempo se ha convertido en un canon con una estética precisa, perfecta para los parámetros de Instagram, y que de alguna manera recuerda la época de los hippies.
Su residencia en Australia
El modelo de Zac Efron cuenta con tres televisores de pantalla plana, salón tapizado en cuero italiano y muebles hechos a mano
Por tanto, no es de extrañar que también algunas estrellas generacionales, como los actores Zac Efron o Chris Hemsworth, se hayan convertido en abanderados de este estilo de vida tan reñido con las comodidades de las mansiones de Hollywood. En specific, la nueva compra del protagonista de la serie Glee ha despertado el interés entre sus fanáticos y los apasionados de las caravanas.
A sugerencia de Hemsworth, amigo y dueño de un modelo related, Efron, que se trasladó a Australia en marzo del año pasado para escapar de la violencia de la pandemia en Estados Unidos, adquirió una caravana -modelo Hollywood- construida y personalizada por la empresa australiana Lotus, experta en la producción de vehículos para el caravaning de alta gama. El actor de treinta y dos años ha establecido su residencia australiana sobre estas cuatro ruedas.
La caravana está equipada con tres televisores de pantalla plana, uno de los cuales es de 50 pulgadas con elevador motorizado, un salón tapizado en cuero italiano, un baño independiente con lavandería y muebles hechos a mano. Además, el exterior es de acero ecológico, equipado con placas solares y baterías de litio, ya que ambos divos son también activistas en la lucha contra el cambio climático.
Como explica Kane Morley de Lotus: “En Australia este tipo de vehículo es parte de nuestra cultura, además, seguimos prefiriendo las caravanas a las autocaravanas, a diferencia de lo que ocurre en Europa. El caso es que en los últimos diez años se han comenzado a construir caravanas muy modernas y elegantes que compiten con los acabados más lujosos de los yates”.
La autocaravanas, más habituales en Europa, también han subido muchos escalones hacia el lujo más exclusivo
Alta gama en alquiler en Europa
Un mercado cada vez más joven
También en el norte de Europa, donde las vacaciones nómadas en contacto directo con la naturaleza siempre han formado parte de la cultura common, existe un importante mercado dedicado a los modelos de alta gama. La novedad radica en que si hasta hace poco esta period una opción reservada a los ‘boomers’ o a pensionistas adinerados, ahora, gracias sobre todo al alquiler y al ‘sharing’, incluso las familias jóvenes se acercan a este mundo. Páginas net de alquiler como Camperent.internet o Adria-Holidays.internet exhiben modelos que nada tienen que envidiar a los yates más exclusivos: paredes insonorizadas, cristales panorámicos, terrazas, iluminación LED, cocinas extraíbles al exterior, garajes que pueden albergar un Ferrari. En algunos casos, estos vehículos alcanzan los 15 metros de longitud por más de 60 metros cuadrados de habitabilidad dotados de todas las comodidades, hasta el punto de competir con un apartamento. Con la diferencia de que en este caso el entorno puede cambiar al gusto del propietario.
Los interiores también suelen ser un concentrado de lujo, entre revestimientos de mármol, tejidos preciados, camas king measurement, áreas spa, domótica e incluso ascensores. Ser dueño de uno de estos gigantes de la carretera significa desembolsar poco menos de medio millón de euros, con modelos extremely personalizados que pueden llegar a costar hasta tres millones.
Ramón Terradellas, vicepresidente de Aisecar, la asociación representativa del sector, comenta que “en España todavía el caravaning no se relaciona con el lujo. Aquí son una minoría los que adquieren vehículos con precios superiores a los 250.000 euros completamente personalizados. Nuestro mercado es bastante pequeño y, además, tenemos unos impuestos muy altos por la compra de una autocaravana”, matiza.
El dormitorio de la caravana Lotus Hollywood, el modelo que han adquirido los actores Zac Efron y Chris Hemsworth
En cambio, en Alemania, Austria o Holanda existen muchos constructores dedicados a este tipo de clientela. La diferencia no es solo cultural, sino también de infraestructuras. Además de carreteras más anchas y diferentes entramados urbanos que permiten la movilidad de vehículos con un tonelaje importante, en nuestro país existe sobre todo una carencia de plazas de estacionamiento.
En España se encuentran unas 1.000 áreas para autocaravanas, frente a las 4.500 de Alemania, las 6.000 de Francia o las 3.500 de Italia. Además, en Francia, Alemania y los Países Bajos estas áreas están perfectamente equipadas, mientras que en España a menudo son solo estacionamientos donde, por ejemplo, no es posible cargar agua limpia y descargar aguas grises.
España es un país turístico, pero las infraestructuras son insuficientes para el auge que vive este sector
“España es un país turístico, pero las infraestructuras son insuficientes porque en los últimos veinte años ha habido un auge de este tipo de turismo que no ha sido comprendido por el regulador”, explica Terradellas. “Tenemos campings de mucha calidad pero los autocaravanistas a menudo no quieren quedarse en áreas que suelen estar alejadas de las ciudades. Hacen falta más plazas de estacionamiento en los lugares de interés”, denuncia el impresario catalán.
El concepto de lo que significa el turismo nómada ha cambiado por completo: hoy también es una opción elitista
De hecho, una tendencia que se puede encontrar en toda Europa, a diferencia del caso australiano, es el aumento de las autocaravanas en detrimento de las caravanas que ofrecen una menor libertad de desplazamiento. Esto también ocurre como consecuencia del cambio en el perfil del comprador, como confirma Tarradellas: “Hace unos años la mayoría eran personas a partir de los cincuenta, en cambio, ahora hay mucha gente joven que se decanta por un camper”.
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Como nos han enseñado estos meses, además de la salud, gran parte de la felicidad radica en la libertad de elección y movimiento. Y si puedes disfrutar de esta libertad a bordo de una mansión con ruedas, seguro que sabe incluso mejor.
” Fuentes www.lavanguardia.com ”
