Las raíces de la tradición: el auge del turismo interno en China durante el feriado de Qingming
En el vasto y milenario territorio chino, el feriado de Qingming se erige como una celebración profundamente arraigada en la cultura del país, marcando una conexión tangente entre el presente y el pasado. Este evento, también conocido como el Día de Limpiar las Tumbas, no solo invita a la reflexión y al homenaje a los ancestros, sino que también ha dado lugar a un fenómeno muy notable en los últimos años: el auge del turismo interno.
Cada primavera, durante el mes de abril, millones de ciudadanos chinos se lanzan a las carreteras, trenes y aviones para honrar a sus antepasados. Este 2023 no fue la excepción, ya que el feriado impulsó un notable incremento en los viajes, revelando un crecimiento vibrante en la economía interna del país. Se estima que más de 100 millones de viajeros se desplazaron a lo largo y ancho de la nación, explorando paisajes que, para muchos, quedaron relegados a un rincón de la memoria pasada.
Este alza en el turismo no solo refleja un deseo de recordar a los seres queridos, sino que también resalta una creciente tendencia entre los chinos a explorar su propia tierra. Las autoridades han reportado un aumento en la inversión en infraestructura turística, que va desde la mejora de carreteras hasta la creación de nuevos destinos atractivos. Las ciudades históricas, como Xi’an y Hangzhou, y los impresionantes paisajes naturales del Parque Nacional Zhangjiajie, se han convertido en paradas obligadas para aquellos que buscan experimentar la rica diversidad cultural y natural de China.
Una de las características que distingue esta celebración es su dualidad. Por un lado, hay un profundo respeto por las tradiciones familiares; por otro, el deseo de disfrutar del tiempo libre. Las visitas a las tumbas son acompañadas por excursiones a parques, reservas naturales y sitios históricos, donde la recreación se mezcla con la reflexión. Este equilibrio entre honrar a los ancestros y celebrar la vida se ha convertido en un pilar de esta festividad, atrayendo a una nueva generación de turistas que desean conectar con sus raíces.
El impulso por viajar también se ha visto respaldado por las políticas gubernamentales, que han fomentado el turismo interno como una vía para estimular la economía tras los desafíos de la pandemia. La promoción de destinos menos conocidos ha generado una redistribución del turismo, alejándolo de las típicas multitudes en lugares emblemáticos, lo que ha brindado oportunidades para que regiones menos favorecidas en el mapa turístico comiencen a brillar.
Además de la economía, el turismo en este periodo ha permitido un reencuentro social. Familias enteras se agrupan para viajar juntas, reforzando lazos y creando memorias mientras redescubren sitios que quizás hayan visitado en su infancia. Las redes sociales han jugado un papel crucial al documentar estas aventuras, impulsando a otros a seguir el ejemplo y explorar la vasta riqueza cultural que China tiene para ofrecer.
A medida que Qingming se convierte en un catalizador para el viaje, es evidente que este feriado ha trascendido su significado original. Se está convirtiendo en una celebración de la vida, la cultura y la identidad china. Atrapados en un mundo donde las conexiones se desdibujan, este evento anual nos recuerda la importancia de nuestras raíces, al tiempo que fomenta un espíritu de descubrimiento. Las tradiciones se entrelazan con las aspiraciones modernas, creando una rica tapestry cultural que invita a todos a ser parte de ella.
En un contexto donde el turismo global busca recuperarse, el renacer del turismo interno en China durante Qingming ofrece una lección invaluable: a veces, la búsqueda de lo extraordinario nos encuentra en los lugares más cercanos a nuestro hogar. Así, entre honores y celebraciones, el viaje por China continúa, resonando con historias que merecen ser contadas.
” Sources www.prensa-latina.cu ”
” Fuentes www.prensa-latina.cu ”
