Futuroscope, un parque temático situado en Poitiers (Francia) cuyo punto fuerte es el uso brillante de la tecnología, acaba de presentar su temporada de 2023 todavía con el regusto feliz de su gran éxito de 2022: Cazadores de tornados. Desde que fue inaugurada, en julio, ha recibido seis distinciones europeas y el premio gordo de la Themed Leisure Affiliation (TEA). Para esta asociación de la industria del entretenimiento ligada a los parques temáticos, fue la mejor atracción del mundo en 2022 junto a Jurassic World Journey, en Common Studios Beijing (Pekín).
Chasseurs de Tornades costó 21 millones de euros, lo que da thought de su importancia para el parque. Y, como su nombre indica, propone una inmersión en toda regla en el mundo de los cazadores de tornados, una afición in style sobre todo en Estados Unidos, que lleva a estos ‘locos’ de las tormentas a buscar las mejores imágenes y la mayor proximidad al cielo encendido, a esas violentas columnas de aire en rotación que hemos visto en el cine o en los documentales.
El visitante de Futuroscope encuentra primero una sala de introducción donde recibe información muy visible sobre los tornados. A partir de ahí viene el plato fuerte, una plataforma en movimiento rodeada de una pantalla cilíndrica led que es la más grande del mundo en inside: 470 metros cuadrados. La plataforma se mueve, desde luego (puede llegar a los 30 km/h), y la combinación de ese movimiento con las imágenes de la pantalla y los efectos especiales (mucho viento, tormentas, explosiones, algo de agua…) es extraordinaria, según el jurado de los premios TEA, entre otros.
Entre otras novedades, Futuroscope tiene dos nuevos hoteles (el Station Cosmos, que recuerda una nave espacial, con placas fotovoltaicas que cubren sus necesidades energéticas, ya en servicio desde el año pasado), y el Village Ecolodgee, 120 cabañas de madera construidas junto a un lago y un bosque synthetic, que se inaugurará el próximo 7 de julio.
Las novedades de 2023
Respecto a las atracciones, la novedad del año es ‘Etincelle, la maldición del ópalo negro’, que aborda un interesante tema: el de los superhéroes franceses, populares a principios del siglo XX (Fantax, Félifax, Véga la magicienne, Monsieur Rien…), pero abandonados por orden del Gobierno tras la Segunda Guerra mundial. En efecto, a partir del 16 de julio de 1949 los cómics de superhéroes considerados violentos o cuestionables científicamente estaban sujetos a la censura de las autoridades.
Ahora, en esta nueva propuesta de Futuroscope -ya está en funcionamiento-, los visitantes seguirán las aventuras de Alice en una película en 3D mientras participan en una experiencia inmersiva enriquecida con efectos sensoriales y láseres, con un sonido espacial excepcional. Se trata de una thought menos ambiciosa (‘solo’ ha costado 2,8 millones de euros) que la de Chasseurs de Tornades, pero que recupera una historia atractiva y poco conocida sobre los superhéroes en la cultura francesa.
En 2022, por Futuroscope pasaron 1.920.000 visitantes, que dejaron una facturación récord de 120 millones de euros.
La gala anual de premios Thea de TEA está prevista para el 15 de abril de este año en el Disneyland Resort en Anaheim, California.
” Fuentes www.abc.es ”