¿Listo para viajar? No tan rápido si eres propenso a las alergias. Un reciente estudio encontró que aquellos que sufren de alergias estacionales podrían tener un mayor riesgo de experimentar reacciones alérgicas durante sus viajes. Esto sin duda puede ser un fastidio para aquellos que desean disfrutar de unas vacaciones libres de preocupaciones.
Las alergias estacionales, como la fiebre del heno, son desencadenadas por el polen y otras partículas transportadas por el aire, lo que puede ser especialmente problemático en destinos turísticos en temporada alta. Los síntomas comunes incluyen estornudos, picazón en los ojos, congestión nasal y sibilancias, lo que sin duda puede arruinar la diversión de cualquier viaje.
Entonces, ¿qué puede hacer un viajero alérgico para minimizar el impacto de las alergias durante sus vacaciones? Primero, es importante investigar el destino y sus patrones de polinización. Si es posible, evitar viajar a destinos con altas concentraciones de polen durante la temporada de alergias puede ser una solución fácil.
Además, consultar a un alergólogo antes de viajar puede ser de gran ayuda. El médico puede recetar medicamentos antialérgicos o incluso inmunoterapia si es necesario. Empacar medicamentos de venta libre, como antihistamínicos o aerosoles nasales, también es una buena precaución para tener a mano en caso de emergencia.
Otra opción es buscar alojamiento que ofrezca habitaciones libres de alérgenos y mantener las ventanas cerradas para evitar la entrada de polen. Algunas ciudades incluso ofrecen servicios de pronóstico de polen en línea, lo que puede ayudar a los viajeros a planificar sus actividades al aire libre durante su estancia.
En resumen, viajar con alergias estacionales puede parecer un desafío, pero con la planificación adecuada y la comunicación con profesionales de la salud, los viajeros alérgicos pueden minimizar el impacto de las alergias y disfrutar al máximo de sus vacaciones. ¡No dejes que las alergias arruinen tu próximo viaje!
” Sources www.medpagetoday.com ”