Daniella Levine Cava, la alcaldesa del condado de Miami-Dade, considerado como la “capital de los cruceros” de los Estados Unidos, le escribió una carta pública a la nueva titular de los Centros de Management y Prevención de Enfermedades (CDC), Rochelle Walensky, solicitándole que ratifique la autorización para el regreso de los cruceros “cuanto antes”, o al menos que sea fijado el 4 de julio como fecha de retorno.
Tras un año sin operaciones como consecuencia de la pandemia, los cruceros siguen paralizados en los puertos de los Estados Unidos, debido a que los Centros de Management y Prevención de Enfermedades (CDC) califican a este producto turístico como de “muy alto riesgo de contagio” de COVID-19 (Nivel 4) y recomienda a todas las personas no abordarlos.
El presidente del país, Joe Biden, fijó el 4 de julio, Día de la Independencia estadounidense, como la fecha para iniciar la vuelta a la normalidad después de la pandemia. Y las navieras están ajustando sus itinerarios teniendo en cuenta esa bandera de largada, aunque iniciando paulatinamente sus operaciones desde junio.
Miami-Dade pide al Gobierno estadounidense habilitar los cruceros “cuanto antes”
Pero el condado de Miami-Dade, en el estado de la Florida, asegura que se le hace muy difícil esperar tanto, y pide que al menos le otorguen la certeza de ese retorno.
La alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, le escribió una carta pública a la flamante titular de los CDC, Rochelle Walensky, en la que sostiene que el reinicio de los itinerarios es “de una importancia crítica para salvar cientos de miles de empleos” en Estados Unidos, tras un año sin actividad
Los cruceros suponen sólo en Miami-Dade una actividad económica que genera US$ 7.000 millones al año y 40.000 empleos, además del impacto económico y social indirecto.
La alcaldesa Levine Cava exhortó a Walensky a permitir “una pronta reanudación” de los cruceros, y sugiere que se confirme el 4 de julio.
Un issue a favor de sus argumentos, sostiene, es la masificación de la vacunación en el país, que ya alcanza los 100 millones de dosis, así como las medidas tomadas en Port Miami y en su condado para evitar contagios. Siguiendo esa línea, solicita que la apertura se produzca “cuanto antes”.
De hecho, para mostrar mayor proactividad, se refirió a su plan de instalar un centro de pruebas de COVID-19 en Port Miami, que sería “el primero del país”, además de que muchas compañías han decidido exigir que todas las personas a bordo estén vacunadas, tanto pasajeros como tripulantes.
Finalmente, la alcaldesa resaltó que las compañías de cruceros “no están buscando ayuda federal”, a pesar del duro impacto de la disaster durante el último año.
Según la asociación CLIA, en términos globales, entre marzo y septiembre de 2020 se perdieron US$ 77.000 millones en facturación; US$ 23.000 millones en salarios; y 518.000 puestos de trabajo.
” Fuentes www.hosteltur.com ”