El de Mendoza es un caso de anlisis. La economa tuvo el peor ao en dcadas, los indicadores sociales son negativos y an no hay efecto rebote. Sin embargo, el Gobierno camina con una tranquilidad poltica que podra denotar otra realidad. Tanto, que hasta concentra sus energas fuera de los temas calientes de la vida cotidiana, como la inflacin, la inseguridad y la prdida del empleo. Probablemente Rodolfo Suarez transita ese sendero gracias a una caracterstica specific: el suyo es un gobierno subexigido; con poca competencia y al que no le hace falta hacer ruido para evitar sobresaltos.
Como todo en la vida, no se puede culpar a uno de las carencias ajenas. Pues Suarez las capitaliza a su modo. Es que parte de la falta de tensin viene por la baja efficiency de sus opositores; dedicados ms a las bravuconadas que a la construccin de un proyecto de poder. Suarez recibe insultos en Twitter, pero no se siente amenazado polticamente. Realidad o exceso de confianza.
El Gobernador y el Presidente Alberto Fernndez tuvieron un empoderamiento enorme en 2020 con el inicio de la pandemia. La emergencia los puso en situacin de privilegio en cuanto a sus poderes y la imagen pblica. Luego, Suarez pudo mantener esa impronta y tuvo buenos resultados por el manejo de la pandemia y con la thought de enfrentamientos a la Nacin. No qued an impregnado de la negatividad por la falta de gestin econmica. Alberto Fernndez, en cambio, tuvo un derrumbe en su imagen desde agosto del ao pasado y la cada en la valoracin tuvo que ver, justamente, con la situacin econmica y social.
Luces de alerta
Cualquier encuesta de opinin marca el camino, aunque desde la Nacin y la Provincia construyan discursos sobre otros temas. Las principales preocupaciones de la ciudadana pasan por los problemas econmicos y sociales. La inflacin est al tope porque es el indicador ms tangible. El 30% de los mendocinos lo tiene como principal preocupacin (segn una encuesta de Analogas), justo cuando se conoci que el ndice de febrero rozaba los 5 puntos. El temor a la prdida del empleo y la pobreza tambin estn en el mismo nivel.
Tercero en el orden de preocupaciones est la inseguridad. De ese podio, al Gobierno native lo que ms le preocupa tiene que ver con la seguridad ciudadana, particularmente porque muchas de sus causas y consecuencias estn lejos del alcance de la gestin. En el diagnstico que hacan el ao pasado sobre los problemas colaterales que traera el aislamiento social, la inseguridad period uno de los principales. Por eso hay quienes dentro del Ministerio de Seguridad siguen de cerca los datos. Desde el plano poltico, buscan que no haya agitacin.
En ese tema el Gobierno de Suarez tiene una caracterstica: el bajo perfil de quienes deben liderar la gestin. Ocurre con Ral Levrino, ministro de Seguridad, lo mismo que con otros jefes de rea. En la gestin anterior el Ministro tambin tena un rol algo desdibujado, pero por el protagonismo que tena Alfredo Cornejo con el tema: Seguridad y Justicia eran sus prioridades.
El bajo perfil del gabinete de Suarez es tema de discordia interna en el radicalismo tambin. Creen que hay funcionarios que se quedaron acotados a la mirada municipal y otros que, con la menor demanda de trabajo, prefieren mantenerse en velocidad crucero. Internamente hubo tres etapas. Primero fue el “acomodamiento” a los distintos ritmos de trabajo; al que tena Cornejo y al que impuso Suarez. Luego hubo tensin por la misma razn: hay quienes crean que haba que imponer otra dinmica. Ahora est la etapa de resignacin: adems de la baja intensidad, no sienten amenazas.
No ocurre solo en el Poder Ejecutivo, sino en otros sitios que la UCR ha copado en su estructura de poder, como la Universidad Nacional de Cuyo. La principal casa de estudios de Mendoza y la regin trabaja a media mquina, con facultades completamente cerradas y con clases virtuales. Mientras, muchas de las autoridades radicales pasean en agasajos y eventos polticos; ms cercanos a la rosca que a la gestin de una institucin que tiene uno de los presupuestos ms abultados (ms de 8 mil millones de pesos) y ms de 50 mil personas bajo su rbita (entre docentes, alumnos y no docentes). La UNCuyo es otro de los organismos pblicos “subexigidos” en uno de los momentos clave de la vida de Mendoza.
“Dejarla pasar”
Uno de los problemas que hay en el escenario poltico no es atribuible al Gobierno. La falta de competencia genera pachorra. Suarez y el radicalismo no se sienten amenazados. De hecho estn ms preocupados por las tensiones internas de Juntos por el Cambio. El Frente de Todos, principal fuerza opositora, tambin: an no amalgama un proyecto de poder puertas afuera de las unidades bsicas o las oficinas pblicas nacionales copadas por el equipo de Anabel Fernndez Sagasti.
Las elecciones de 2021, por ejemplo, se plantean con un escenario estratgico puertas adentro, ms que como una proyeccin al futuro. Todo indica que las listas y la estrategia quedar en manos de Fernndez Sagasti y el kirchnerismo, junto con sus aliados. Desde el peronismo ms ortodoxo, pero aliado de Anabel, tienen una estrategia conservadora: dejar pasar a Anabel con toda la furia para este ao y que, llegado el caso, “choque” con un mal resultado para luego plantear competencia interna hacia 2023. Aunque no coincidan, no se animan a poner barreras a la Senadora nacional y sus aliados.
El plano que no incluye ese anlisis es el estratgico: si Anabel arma “sola las listas”, seguir construyendo poder interno en la Legislatura y los departamentos; al estilo Cornejo 2011. La visin ms pesimista es que si no se arman listas competitivas y diversas dentro del Frente de Todos, puede haber un resultado difcil de digerir electoralmente.
El peronismo y tambin el Frente de Cambia Mendoza miran con recelo lo que ocurra con alguna tercera fuerza. Dependiendo el perfil que tome (ms liberal o ms well-liked) quin pueda salir perjudicado y tambin cul de los dos frentes “ayude” a conformarla.
Estrategias, especulaciones y caminos trazados. Todos, ms cerca de la autoayuda que del bien comn.
” Fuentes www.mdzol.com ”