Adif e Iberdrola, las dos patas del proyecto para habilitar la pasarela peatonal del barrio El Crucero, ya han salvado todos los trámites burocráticos que durante dos años han impedido comenzar con las labores en la instalación anexa a la línea ferroviaria. Así, el administrador ferroviario ya ha aceptado el presupuesto planteado por i-DE, la empresa de distribución eléctrica del grupo Iberdrola, y está previsto que, durante la primera semana de julio, comiencen los trabajos para elevar la línea eléctrica de Plasmir y así acabar con las anomalías de distancia respecto a la pasarela sobre el FFCC Madrid-Irún.
El proyecto ha sido adjudicado, por Iberdrola, a la compañía Elecnor, especializada en labores eléctricas, que se encargará de levantar los postes eléctricos en aproximadamente una semana. «Para hacerlo, es necesario ejecutar dos actuaciones: instalar una extensión de cabeza en el apoyo (torre eléctrica) de i-DE, se levanta la parte superior del apoyo y se eleva la línea, del que nace la línea particular e instalar una extensión de cabeza en el apoyo particular de Plasmir», explican desde Iberdrola.
En otro orden de modificaciones, también se llevará a cabo un nuevo paso elevado sobre la carretera N-1, que se conectará con el paso inferior ya existente bajo la línea de ferrocarril Madrid-Irún, al oeste del barrio de El Crucero. Para llevar a cabo esta segunda actuación, es necesario desviar la línea de alta tensión 30kV, propiedad en este caso de i-DE, que cruza por encima tanto de la carretera nacional como la línea ferroviaria.
El cifras
30Kv
de potencia
tiene la segunda instalación eléctrica que habrá que adaptar para un nuevo paso elevado sobre la N1
2009
año en el que
finalizaron las obras de construcción de la pasarela y fue ‘inaugurada’
2,5
metros de anchura
presenta el paso superior, distanciado en 2,66 metros de la primera torreta eléctrica
Adif ha aceptado el presupuesto de i-DE para llevar a cabo la adecuación de las instalaciones eléctricas propiedad de la compañía distribuidora que se van a ver afectadas por el nuevo paso elevado sobre la N-»; y por la modificación de la línea eléctrica particular de Plasmir ubicada sobre la pasarela peatonal.
Confirmado el pago para la elevación de la línea privada e Plasmir, este será el primero de los trabajos en desarrollarse, el que habilita el pasillo superior. «En cuanto a la otra actuación, ya se ha solicitado al Ministerio de Industria la autorización administrativa y, en cuanto de su visto bueno, también se pondrían en marcha los trabajos», adelantan desde la compañía propietaria de la línea eléctrica.
Pese a que i-DE no ha querido facilitar el presupuesto aceptado y abonado por Adif para la elevación de las torres eléctricas, EL CORREO ha podido saber que la primera propuesta del ente ferroviario para la licitación ascendía hasta los 8.861 euros. Además, según recoge el informe remitido por Adif, el triple cableado eléctrico pasaría de estar a una altura de a 2,66; 3,40 y 4,66 metros de distancia de la pasarela, respectivamente; a alejarse a 5,10; 5,80 y 7,10 metros.
En relación al cálculo base planteado por Adif, de 8.861 euros, y no el aprobado finalmente, cabe destacar que se dividía en los 3.194 euros (impuestos incluidos) destinados a la línea aérea (forrado de elementos, balizamiento, tramo para pararrayos); y los 5.667 euros restantes que irán a parar al transporte de elementos electrógenos, gestión, el sistema de cadena de amarres y el estudio preventivo de los trabajos, entre otros apéndices incluidos.
Por otra parte, «cabe recordar que la línea eléctrica que sobrevuela la pasarela es de un cliente particular y que i-DE, a petición de Adif y del Ayuntamiento de Miranda, planteó una solución inicial global para trasladar esa línea y así agilizar el proceso y para facilitar a este cliente que, con el mínimo coste, pudiera trasladarla. La Demarcación de Carreteras de Castilla y León Oriental denegó el permiso de paso por la N-1 en base a la legislación actual, ya que no se podía interrumpir el tráfico en carreteras con una alta intensidad de tráfico diario. La nueva solución no afecta a esa vía», rememoran desde la compañía eléctrica.
La puesta en marcha de la pasarela peatonal, creada en el año 2009 para salvar las vías y que cuenta con una anchura de 2,50 metros, sigue pendiente. Sin embargo, salvo que aparezcan nuevos obstáculos, todo apunta a que finalmente los mirandeses podrán hacer uso del paso superior desde mediados de julio. Catorce años después, la pasarela peatonal entrará en funcionamiento.
” Fuentes www.elcorreo.com ”