Hito histórico para la industria naval. La naviera Royal Caribbean prepara en el astillero Meyer Turku de Finlandia la construcción del nuevo Icon of the Seas, el primer barco de la línea de cruceros con tecnología de pila de combustible y propulsado por gas natural licuado (GNL) que, tras una inversión de más de 2.000 millones de dólares (unos 1.815 millones de euros) en su desarrollo, se convertirá en el crucero más sostenible de la naviera hasta la fecha.
Tal y como recoge Europa Press, el nuevo gigante de los mares supondrá un paso más en el viaje hacia las emisiones cero de la compañía ya que el combustible marino más limpio que se conoce hasta la fecha permitirá reducir de forma considerable las emisiones de carbono a la atmósfera, lo que representa un 20% menos de emisiones de gases de efecto invernadero que barcos anteriores.
Además contará con conexión a la red eléctrica en tierra, sistemas de recuperación de calor residual, así como múltiples opciones de energía limpia que permitirán al buque eliminar la mayor cantidad posible de emisiones y desechos sólidos producidos a bordo.
“Tenemos la responsabilidad con nuestro planeta de continuar evolucionando y hacer que nuestros barcos sean lo más sostenibles posible, debemos asegurarnos de ofrecer las mejores vacaciones, pero hacerlo de manera responsable”, ha resaltado el presidente y director ejecutivo de Royal Caribbean Group Jason Liberty.
Convertirá los desechos en energía
Además de ser el primer barco de la línea de cruceros propulsado por gas natural licuado (GNL) y tecnología de pilas de combustible, la embarcación también introduce una planta en el mar, la primera de su tipo, que convertirá los desechos en energía.
El gas natural licuado permite una mayor reducción de las emisiones en general, prácticamente cero dióxido de azufre y partículas, y una reducción significativa en la producción de óxido de nitrógeno.
Al combinar el GNL con otros avances como la conexión a tierra o los sistemas de recuperación de calor residual que reutilizan el exceso de energía para ayudar a impulsar las operaciones del barco, el Icon supondrá el siguiente paso en el viaje de Royal Caribbean hacia un futuro de energía más limpia y de emisiones cero.
Además de optar al título de barco más grande del mundo, el Icon of the Seas se ha presentado como el mayor parque acuático en el mar. En concreto, la embarcación contará con seis toboganes, uno de ellos con una caída de 14 metros, y tendrá una pista de obstáculos que abarcará uno de los costados del buque, a casi 47 metros sobre el nivel del agua.
” Fuentes www.huffingtonpost.es ”