Con el incremento del empleo asalariado registrado en el sector privado observado en febrero último, se acumulan 31 meses de crecimiento consecutivo, lo que da lugar al período de crecimiento más prolongado de los últimos 14 años.
E
n este lapso, 514 mil personas accedieron a puestos de trabajo asalariados formales en empresas privadas, refleja tanto la información de la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) como la que surge del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).
No obstante, el salario promedio -medido en términos reales- presenta en febrero de 2023 una variación interanual negativa del 0,7%.
La pérdida no es más significativa gracias a la capacidad y rápida reacción de las negociaciones colectivas, que logran adaptarse cada vez más rápido a la dinámica de los precios, a través de acuerdos con ajustes en periodos cada vez más cortos, destaca el documento producido por el Ministerio de Trabajo.
Crecimiento del empleo asalariado sectorial
El empleo asalariado registrado del sector privado creció en febrero 0,2% con respecto al mes anterior (serie sin estacionalidad) de acuerdo con la información procesada del (SIPA).
Así, en el segundo mes del año, unas 13 mil personas accedieron al empleo asalariado formal privado.
A pesar de los problemas de la macroeconomía y el freno de la actividad que ya se hace sentir, especialmente con el impacto de la sequía, el nivel de crecimiento de asalariados se mantiene con una tasa de crecimiento regular en los últimos cinco meses, en torno al 0,2% y 0,3%.
Actualmente, el número de asalariados registrados en el sector privado es el más elevado desde 2009, alrededor de 6.350.000 trabajadores.
“De este modo, el proceso de expansión del empleo formal vigente permitió recuperar el empleo perdido durante la pandemia y reintegrar la totalidad del trabajo asalariado formal desvinculado entre 2017 y 2019 (últimos dos años de la gestión de gobierno anterior)”, destaca el documento.
Sin embargo, si se observa sectorialmente, los crecimientos son disímiles. Se verificó crecimientos en ocho de los catorce sectores analizados. En dos sectores el empleo se mantuvo estable, mientras que en cuatro se observó un retroceso del empleo.
Entre las ramas de actividad que mostraron mayor dinamismo mensual se encuentran Hoteles y restaurantes (+0,8%) —que en febrero alcanza el mayor nivel de empleo de la serie—; Servicios comunitarios, sociales y personales (+0,5%); Explotación de minas y canteras (+0,4%), y Comercio (+0,4%).
Si se observa la serie anualizada, la expansión del empleo registrado privado arroja mejores números tanto a nivel sectorial como territorial. El nivel de empleo creció en once de los catorce sectores liderados también por Hoteles y restaurantes (con un crecimiento del 16,7%) y Construcción (12,5%).
Acorde con el impacto de la sequía, los sectores que redujeron su empleo fueron Agricultura y ganadería, Pesca e Intermediación financiera.
A nivel regional, a excepción de Tucumán, el resto de las jurisdicciones presentan crecimiento del empleo en la dinámica interanual.
Evolución de los salarios
“A pesar de la aceleración inflacionaria verificada en los últimos meses, en febrero de 2023 el poder adquisitivo del salario promedio del empleo asalariado registrado del sector privado no sufrió una pérdida significativa”, destaca el Panorama Mensual del Trabajo Registrado (febrero y marzo 2023).
De acuerdo con la información procesada del SIPA, el salario promedio —medido en términos reales— presenta en febrero de 2023 una caída interanual del 0,7%.
Agrega Luis Campos, Coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA – Autónoma desde su cuenta de Twitter que el dato más impactante viene por el lado del ingreso de bolsillo. La mitad de los trabajadores registrados del sector privado tuvieron en febrero un salario inferior a $152.274. En el mismo mes la canasta básica para un hogar de 4 personas ascendía a $177.063.
El documento destaca que, no obstante, el sostenimiento relativo del poder adquisitivo del salario en un contexto inflacionario como el actual es el resultado de la capacidad que presenta la negociación colectiva para adaptarse a la dinámica cambiante de los precios.
En cada una de las fases de aceleración inflacionaria de los últimos diez años, se observa una caída del salario real en un primer momento, pero también se ve que hubo una mayor capacidad de reacción de la negociación colectiva frente a la inflación.
Las mesas paritarias y los acuerdos firmados actualmente incorporan mecanismos que facilitan la rápida renegociación de los niveles salariales preexistentes, proceso apoyado y articulado por el Gobierno Nacional.
Ya es moneda corriente que las paritarias cerradas sean trimestralmente con ajustes mensuales o cada dos meses, lo que hace que cuando se mire retrospectivamente, en el último año la mayoría de los acuerdos paritarios terminaron con ajustes en nueve o diez meses de los doce del año. Efecto propio de la inflación, y la necesidad de cubrirse.
El conjunto de los asalariados
En cuanto al conjunto del trabajo registrado (incluyendo en esta categoría al empleo público, al trabajo de casas particulares y al trabajo independiente encuadrado en el régimen monotributista y autónomo), se verifica que, entre febrero de 2022 y febrero de 2023, alrededor de 600 mil personas ingresaron a la actividad laboral.
El total de los trabajadores registrados en la seguridad social, superó por primera vez en febrero de 2023 el umbral de 13.110.000 trabajadores.
Luis Campos destaca que en febrero también crecieron el empleo público (0,4%), los trabajadores por cuenta propia (0,17%) y las trabajadoras de casas particulares (0,17%).
Con lo que concluye que “cada grupo con su particularidad y su trayectoria previa, pero febrero fue un buen mes para la ocupación registrada”.
De acuerdo con la información relevada por la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) en los principales centros urbanos del país, en marzo de 2023 el nivel de empleo privado registrado en empresas de más de 10 personas, se incrementó un 0,1% con relación al mes anterior.
El incremento del empleo se advierte de forma más acentuada en el conjunto de los aglomerados del Interior del país que en Gran Buenos Aires.
Consecuentemente, los movimientos de personal son de mayor magnitud que el mes pasado; tanto la tasa de incorporaciones como la de desvinculaciones presentaron aumentos significativos en relación a febrero de 2023.
En tanto, la demanda laboral, fue mayor que la del mes pasado y presenta la tasa más alta del último año. También, las expectativas netas de las empresas con relación a la contratación de personal para los próximos tres meses se mantienen positivas (2,6%).
” Fuentes www.eldiariodelfindelmundo.com ”