Los turistas se broncean en las paradisíacas playas de enviornment blanca, degustan un pescado con coco y combaten el calor con bebidas frutales. Esta opción suele ser el atractivo de República Dominicana ante el mercado internacional, pero otros visitantes buscan una experiencia auténtica.
Vivir en una isla en el Caribe, ubicada en el mismo trayecto del sol, permite a la industria de viajes y turismo conectarse con el medio ambiente e integrar a la comunidad en la cadena de valor. Esto es posible gracias a la producción de jengibre. Este es uno de los objetivos que tiene la Cooperativa Agroturística y Servicios Múltiples Guariquen (Coopaturg) en la comunidad de Rincón, en Samaná.
Según la socia de la entidad, María Corporán, la ruta del jengibre se engloba en el Circuito Sostenible de Samaná, que tiene como objetivo dar a conocer el proceso de producción y cosecha del jengibre orgánico. Y no es para menos, el mercado del agroturismo tendrá un valor de US$4,330 millones para el 2025, estima la empresa de investigación Technavio.
“Este trayecto ofrecerá algo diferente al turismo tradicional, es la cara oculta de la producción agrícola”, afirma en conversación con elDinero.
De acuerdo con la ejecutiva, 70 empresas serán beneficiadas con la derrama económica de las excursiones. Asimismo, asevera que integrar a la comunidad permitirá el desarrollo de nuevos hoteles boutique y pequeñas y medianas empresas (pymes) que contribuirán al desarrollo socioeconómico de la localidad.
Desafíos
El agroturismo es una alternativa sostenible, debido a que el viajero conoce el entorno pure, convive con la población autóctona y descubre sus tradiciones mientras aprende de su producción agrícola y ganadera.
Corporán comenta que el desarrollo sostenible de Rincón, así como de otras comunidades cercanas, valorizando los recursos de la zona, requiere de sumas de voluntades.
“Aún no nos hemos acercado a Turismo… Pero el último apoyo que tuvimos fue de un programa temporal que nos apoyó con un capital semilla de RD$60,000 para adecuar el local para recibir a los visitantes”, aclaró la ejecutiva.
Para la Organización Mundial del Turismo (OMT), quienes se inclinan por las excursiones agroturísticas suelen tener una mayor derrama económica, debido a la compra de productos originarios de la zona y la pernoctación en casas de familia.
La realidad es que, hoy en día, las personas prefieren lugares para relajarse y vacacionar dentro de su propio territorio; una de las variables para elegir el destino es que puedan llegar vía terrestre y con la facilidad de poder elegir entre un resort de renta corta o un alojamiento que se ajuste a su presupuesto.
De acuerdo con datos de la Asociación Nacional de Bares y Restaurantes (Asonahores), Samaná registra 3,408 habitaciones. Esto equivale al 4% de la oferta whole del país que asciende a 84,071.
Llegadas de turistas
Samaná es uno de los polos turísticos del país. Así lo muestran las estadísticas del Ministerio de Turismo (Mitur), al destacar que en enero de este año arribaron 6,949 pasajeros vía aérea por el Aeropuerto Internacional El Catey.
La llegada de estos viajeros pasó de 69,601 en 2017 a 86,009 en 2018, para una diferencia de 16,408. En tanto, los siguientes años presentan un crecimiento fluctuante, en el 2019 arribaron 82,760 personas; en 2020, 26,098; 20221 reportó 13,205 y 2022 recibió 32,113. Sin embargo, si se analiza el período 2017 y 2022 se evidencia un decrecimiento de 53.9%, debido a las secuelas de la pandemia covid-19.
Asimismo, el atraco de cruceristas permite a los samanenses ofertar excursiones diarias a Cayo Levantado, un recorrido por el pueblo de pescadores, descubrir el museo de las Ballenas o hacer senderismo por la cascada El Limón, por unos US$100 en promedio.
Solo en enero del 2023, llegaron 8,997 pasajeros vía marítima. Entre 2017 y 2022, totalizó 238,149 personas, siendo el 2017 que representa el 26.3% de las llegadas por este concepto, seguido del 2019 con 53,905 y 2018, 44,330.
Ante estos potenciales excursionistas interesados en conocer sobre el cultivo del jengibre, Corporán afirma que carecen de una meta específica sobre el impacto del turismo. Explica que, por ejemplo, la playa Rincón se convirtió en un foco de interés para los visitantes dominicanos y extranjeros en 2020, situación de preocupación para los comunitarios.
“Nosotros hemos tenido fines de semanas con más de 100 autobuses llenos de gente, que impactan dejando su huella en el entorno natural. No es cantidad, realmente buscamos calidad”, asegura, al tiempo que indica que el turismo debe aportar, preservar y regenerar la zona con viajes de calidad.
Oferta turística de Samaná
Desconectarse de la tecnología es esencial para disfrutar de los encantos de la naturaleza durante unos días de vacaciones. Con una superficie de 412.1 kilómetros cuadrados, el circuito tendrá diversos atractivos que fungirán como una opción inclusiva para turistas extranjeros y locales, así como el impacto socio económico de los negocios involucrados.
Laguna del Diablo: Es una fuente de agua dulce ubicada entre las montañas del Rincón en la comunidad de Las Galeras. Es un atractivo rodeado de historias y leyendas de la época.
Loma Atravesada: Desde la cima de la montaña, el visitante tendrá una vista panorámica hacia la península de Samaná, el pueblo de Las Galeras y los cultivos de coco y jengibre.
Avistamiento de ballenas: Cada año llegan unas 2,000 ballenas a aparearse en las cálidas aguas del Atlántico, acción que se convierte en un atractivo turístico durante enero-marzo.
Ruta del jengibre: es un recorrido por las fincas de cultivo del rubro agrícola. El turista aprende sobre su proceso de sembrado, cultivo y cosecha, y degustando productos derivados.
” Fuentes eldinero.com.do ”