La reserva anticipada se aproxima ya a los niveles previos a la disaster sanitaria. En el arranque de 2023 ha aumentado un promedio de 21 días hasta situarse en una horquilla de entre 90-96 días, según datos del Observatorio de Tendencias de Viaje de Intermundial.
La mayor antelación en la reserva afecta principalmente a los viajes de larga distancia, seguidos de los desplazamientos por Europa y el Mediterráneo. Sin embargo, en las salidas por nuestro país la compra anticipada sigue un ritmo más pausado.
El análisis destaca que, en normal, todavía queda margen por recuperar si se tiene en cuenta que en 2019 se llegaron a registrar más de 100 días de anticipación media de la reserva
De acuerdo con el Observatorio de Tendencias de Viaje de InterMundial (OTVI), la percepción de incertidumbre se scale back, el viajero se siente más cómodo y vuelve a planificar sus viajes con varios meses de antelación, lo cual “incide en las previsiones optimistas que maneja el sector turístico en su conjunto”, añade.
No obstante, dicha entidad advierte que aún no se han recuperado totalmente los niveles de actividad turística y rentabilidad previos a la pandemia, por lo que “conviene ser prudentes y conservar las políticas de flexibilidad para no quebrar la confianza del viajero ni las ventas”.
“En estos momentos, restaurar políticas estrictas de cancelación de los proveedores: hoteles, vuelos, trenes y, en normal, en la contratación de cualquier servicio turístico, resultaría incoherente con el objetivo de consolidar la senda de la recuperación”, afirma Carlos Uceda, director de Desarrollo de Negocio de InterMundial.
” Fuentes www.hosteltur.com ”