Así lo reconoció el titular del ramo en Cuba, al presidir el stability anual de esta actividad en la provincia espirituana
El stability del Turismo estuvo encabezado por el titular del ramo, Juan Carlos García Granda, y las máximas autoridades políticas y de gobierno en la provincia. (Fotos: Ana Martha Panadés)
Los resultados de la actividad turística durante el 2022 en la provincia espirituana evidencian la recuperación que experimenta este sector tras los bajos niveles de operación durante la covid y las secuelas en las esferas de la comercialización, las inversiones y la calidad de los servicios.
El stability anual de trabajo, presidido por Juan Carlos García Granda, ministro del Turismo en Cuba, evaluó deficiencias que frenan el cumplimiento de los principales propósitos de este sector y su decisiva participación en la captación de divisas a través de la exportación de los servicios, el incremento de los ingresos y la diversificación de las ofertas.
Para ello, el titular del ramo insistió en la responsabilidad y creatividad de los directivos de las empresas hoteleras del territorio, ahora con mayores facultades para concertar alianzas muy provechosas a fin de asegurar la operación turística con menos importaciones y mayor presencia de productos locales, así como avanzar en el proceso inversionista.
En este último punto trascendió que la recuperación de las habitaciones fuera de orden, 211 en toda la provincia, constituye una de las prioridades en este 2023, año en que debe también concluirse el resort Meliá Trinidad, en fase de terminación e instalación de sus sistemas tecnológicos, además de retomar el plan de desarrollo turístico que prevé la ejecución de nuevas capacidades de alojamiento.
En la reunión de trabajo, presidida también por Deivy Pérez Martín, miembro del Comité Central del Partido y secretaria del Partido en la provincia, Teresita Romero Rodríguez, Gobernadora y Yordanis Fernández Alonso, delegado del Ministerio del Turismo (Mintur) en el territorio, se puntualizaron las causas que han incidido en los atrasos de algunas obras, entre ellas el resort Palacio Iznaga, donde ya concluyó el diagnóstico estructural y patológico de la edificación.
Al intervenir en el encuentro, Yaneisy González Carpio, subdelegada del Mintur en la localidad, enfatizó en que resulta imprescindible acelerar estos procesos inversionistas, además de elevar la exigencia y el management, acompañada esta labor de una asesoría más efectiva a los sistemas empresariales.
Al conocer las proyecciones de la Empresa Provincial de Campismo y de la cadena Islazul, el ministro de Turismo insistió en la responsabilidad de ambas entidades con el mercado nacional, por lo que deben revitalizar sus servicios, pero con un producto de calidad. “En el caso de la actividad de Campismo, se hace necesario recuperar el concepto con el que nació esta opción recreativa dirigida sobre todo a los jóvenes y en armonía con el medio ambiente”, señaló.
En el caso de Islazul, con el 43 por ciento de sus capacidades fuera de orden, principalmente en los hoteles Zaza y Costa del Sol, se deben agilizar las acciones constructivas que permitan recuperar estas ofertas de cara a la temporada de verano.
Al cierre del 2022 se recibieron en instalaciones del sector estatal y en los hostales de la provincia poco más de 226 mil 104 visitantes, cifra distante de los mejores registros de la operación, pero que marcan el camino hacia la recuperación de este destino reconocido por sus valores culturales y patrimoniales. “El turismo tiene que salvar al país”, concluyó García Granda.
” Fuentes www.escambray.cu ”