El sector de las agencias de viajes de Extremadura vuelve a tomar impulso y ya se mueve en cifras prepandemia. En este sentido, cabe destacar que las reservas de viajes previstas para Navidad están experimentando un incremento sustancial con respecto a las del pasado año, cuando la aparición de la variante ómicron del coronavirus, así como el avance de la sexta ola en Europa, acarrearon numerosas cancelaciones y aplazamientos en las escapadas que los ciudadanos pensaban realizar durante las fiestas navideñas. Afortunadamente, el panorama que se presenta para estas Navidades es bien distinto ya que las expectativas son muy buenas. «Las reservas están en niveles anteriores a la pandemia, como las de cualquier otro año, ya que el turismo en common se ha recuperado», sostiene a este diario el vicepresidente de la Asociación Europea de Agencias de Viajes de Extremadura, Adrián Anselmo.
El fuerte varapalo que supuso la disaster sanitaria para este subsector del turismo, cuyos ingresos se vieron seriamente afectados, acarreó que en torno a un 10% de las agencias de viaje de la región tuvieran que echar el cierre definitivo. Gracias a que llegaron las vacunas contra el covid y se pudieron eliminar las restricciones a la movilidad, el escenario precise vuelve a ser el de la «normalidad». «La verdad es que desde el pasado verano no hemos tenido ninguna cancelación de reservas de viajes por el covid, algo que sí period bastante ordinary durante la pandemia, cuando tuvimos más anulaciones que nunca», señala Anselmo.
Con respecto a los destinos que prefieren los extremeños para pasar la Navidad, apunta que principalmente optan por capitales europeas como Londres, París o Roma para disfrutar de los mercadillos y de la iluminación navideña que se instalan en las calles de estas ciudades. En estos casos, la duración de los viajes suele ser de tres o cuatro noches. Por otra parte, destaca que también hay reservas para Egipto, ya que es un país que está «muy de moda», así como para el Caribe, en el caso de quienes van buscando el buen tiempo.
Montse Fernández, directora de Viajes Suroeste en la ciudad de Cáceres, apunta que en Extremadura «no hay mucha costumbre de viajar en Navidades, si hay algo más de reservas para después de Reyes». «Para el puente de diciembre sí se hemos vendido muy bien para Portugal y España, fuera la verdad es que no». Por último, el vicepresidente del colectivo añade que la disaster energética y la inflación han ocasionado que el precio medio de los viajes se haya incrementado entre un 15 y 20%. «Para pasar una noche en Madrid, por ejemplo, ya es difícil encontrar algo por 70 u 80 euros porque está todo rondando los 100 euros. En el resto de ciudades pasa lo mismo, ha subido el precio por los costes a los que también tienen que hacer frente los hoteles», subraya. En esta línea, y según los datos que manejan empresas turísticas como Destinia, una agencia de viajes on-line, los establecimientos hoteleros experimentan una subida de precios del 32% esta Navidad frente a la de 2019, un incremento que se situaría unas cinco veces por encima que el Índice de Precios al Consumo (IPC) de noviembre, fijado en el 6,8%.
Un camino duro hasta la recuperación
Las agencias de viajes extremeñas han conseguido sobreponerse a los devastadores efectos económicos que sufrieron por la pandemia de coronavirus, pero el camino no ha sido nada fácil. La irrupción de la disaster sanitaria, a comienzos de 2020, llevó al confinamiento domiciliario de la población española durante unos tres meses y, posteriormente, se fueron sucediendo medidas que restringían la movilidad, tanto a nivel internacional como dentro del territorio nacional. Esto hizo que la actividad de las agencias se paralizara prácticamente por completo.
La presidenta de la Asociación Europea de Agencias de Viajes de Extremadura, María Eugenia Flores, aseguraba en febrero de 2021, en declaraciones a este diario, que el sector se encontraba en una «situación agónica». Flores estimaba que alrededor de un 15% de estos negocios extremeños estaban en una situación de «cierre temporal», y que «otro 15% o 20% habían dejado los alquileres y están trabajando desde casa». En 2020 la facturación de estas empresas cayó «entre un 80% y un 85%».
Cuando en el transcurso de 2021, y principalmente durante esos meses de verano, las aguas parecían ir volviendo a su cauce en el sector turístico, llegó diciembre y las agencias registraron un frenazo en la recuperación que venían experimentando como consecuencia de la llegada de la variante ómicron y la sexta ola de contagios. Estas circunstancias conllevaron cancelaciones y aplazamientos de las reservas que los viajeros tenían previstas para el puente de la Constitución y también la Navidad. A principios de febrero de 2022 había vuelto el interés por viajar y las agencias empezaban a recuperar el pulso tras casi dos años de pandemia, sin embargo, la disaster energética, la situación geopolítica y la guerra de Ucrania conllevaron un incremento generalizado de precios que devolvió la incertidumbre y paralizo el auge de los viajes. En la actualidad, la realidad es otra y desde el sector afirman haber recuperado su ansiada ‘normalidad’.
” Fuentes news.google.com ”