Marqués de Riscal está de enhorabuena con la presentación de su nuevo vino Tapias de Marqués de Riscal 2019. Para celebrarlo ha preparado un evento único, una cata histórica con expertos de todo el mundo: 30 añadas de su colección histórica a través de las que han recorrido sus 160 años de historia.
La bodega riojana ha querido con esta cata, celebrada el pasado 27 de septiembre, reivindicar estos orígenes y su conexión histórica con la Plaza de Burdeos, sistema creado hace siglos para vender el vino a un grupo reducido de clientes mediante los servicios de un dealer.
Al evento acudieron especialistas en la materia y periodistas del sector de diversos países: Nueva Zelanda, Estados Unidos, Francia, Australia, Alemania, Inglaterra, Finlandia, Italia y España, que se reunieron en esta oda al pasado para comprender mejor el presente. Una experiencia única para cada uno de ellos tal y como lo plasmaron en diferentes medios.
Según David Allen, subdirector de Wine Searcher se trata de “una de las catas más sorprendentes que se han organizado este año en todo el mundo”.
Para empezar, pudieron catar las añadas prefiloxéricas (anteriores a la filoxera, una plaga que entró en Europa a mediados del siglo XIX) desde 1862 hasta 1899, otra selección prefiloxérica desde 1909 hasta 1964 y, para terminar, la de las añadas del reserva Barón de Chirel, un vino lanzado en 1991, el primero de alta expresión: Barón de Chirel 1986, que surgió a raíz de una elaboración experimental a partir de uva de viñas viejas de gran calidad y rendimientos muy bajos.
A juzgar por los comentarios de los invitados, la cata resultó todo un éxito. Josep Roca, sumiller presente en esta cata, hacía referencia al acontecimiento en su perfil de Instagram: “Cayeron en mi paladar vinos inexpugnables, indelebles, eternos. Gracias familia @marquesderiscal por un acto bello, con tesoros desprendidos del letargo, aún airosos, solemnes, enteros. Cada botella era un mensaje encubierto, una emoción contenida”.
Por su parte, el periodista Víctor de la Serna dejó claro que “recordaremos ese 1871, finísimo e inmutable, que ya conocimos hace 10 años, ese poderoso, sabroso y oscuro 1889, el frescor joven de ese 1918, ya posterior a la filoxera, y la grandeza de potencia, elegancia y complejidad de ese 1945 ya famoso, quizá el mejor vino español del siglo XX. Bettane, gurú del vino en Francia, dijo de él, en esta cata de Elciego, que era el mejor tinto que jamás había probado”.
Una historia que merece celebrarse
Marqués de Riscal siempre ha sido una empresa pionera y referente del sector vitivinícola. Ya en 1858 se convirtió en la primera bodega de Rioja elaboradora de vinos según los métodos bordeleses, consistente en retirar el raspón del racimo de uvas antes de comenzar la fermentación para evitar sustancias astringentes y los sabores a hierbas, sin olvidar que en 1972 Marqués de Riscal pasó a ser la primera bodega impulsora de la Denominación de Origen Rueda, donde se elaboran sus afamados vinos blancos.
Igualmente famosa por su Ciudad del Vino, un edificio diseñado por Frank O. Gehry y la obra más vanguardista realizada por una bodega española que atrae cada año a far de turistas y amantes tanto del vino como de la arquitectura, Marqués de Riscal comercializa sus productos en más de 110 países y sus vinos gozan de las más elevadas distinciones internacionales, así como numerosos premios y menciones en prensa especializada. Herederos del Marqués de Riscal ha sido elegida como segundo mejor viñedo del mundo en el certamen World’s Greatest Vineyards 2022, por segundo año consecutivo, un rating que se elabora anualmente con los mejores destinos enoturísticos del mundo.
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