Beber un ristretto o degustar los cocteles de un vermut italiano sobre la cubierta de un navío de lujo parece estar entrando en una de las tendencias de turismo más fuertes de la period. Según el Puerto de Cartagena, se ha evidenciado un incremento en la estimación de pasajeros durante las temporadas vacacionales en la capital de Bolívar.
En la temporada 2006-2007, se estimaba una cifra de 74.793 visitantes; durante la temporada 2022-2023, se esperan que 625.777 turistas ingresen a la ciudad; es decir, 614% más.
Los cruceros de lujo establecen una serie de requisitos que se deben cumplir para poder embarcar, como haber sido vacunado con el esquema completo y presentar una prueba PCR negativa realizada en las 48 horas previas al viaje.
Cruzar el Caribe en 15 días, saliendo desde el puerto de Miami pasando por Panamá y Cartagena a bordo de la línea de lujo Azamara, le costaría US$2.554.
La línea antártica está a cargo del crucero Antártica Fiordos de Tierra de Fuego, saliendo desde Punta Arenas, Chile, pasando por la Bahía Ainsworth y Cap Horn y desembarcando en Ushuaia, el puerto del ‘fin del mundo’, como es nombrado por ser el extremo austral de Suramérica. Este trayecto, que dura cinco días, le costaría US$2.845.
En América del Norte, saliendo desde el puerto de Miami, pasando la Costa Maya, llegando a la costa de Belice y desembarcando nuevamente en Miami, le costaría US$1.690. Este trayecto duraría ocho días. Los precios presentados están dispuestos a cambio por temporada.
Los cruceros de lujo evidencian un incremento en la demanda de navíos con tripulación no menor a 100 personas, esto, en torno a las medidas de bioseguridad exigidas por las autoridades internacionales y la clientela. Esa es otra razón por la que el negocio de cruceros tiene un impacto importante en la dinámica económica del país.
” Fuentes www.larepublica.co ”