El Papa Francisco aterrizó en Roma a las 08:08 a.m. (hora native) este sábado 30 de julio proveniente de Canadá, poniendo fin a su 37º viaje apostólico.
La llegada del vuelo estaba prevista para las 07:50 y a pesar de un retraso de alrededor de una hora en el programa, el avión del Papa llegó pocos minutos después de las 8:00 a.m.
El vuelo que trasladaba al Pontífice, junto al séquito papal y los periodistas que lo acompañaban, aterrizó en el aeropuerto de Fiumicino, e inmediatamente después el Papa visitó la Basílica de Santa María la Mayor antes de llegar a la Casa Santa Marta en el Vaticano, según informó la oficina de prensa de la Santa Sede.
Como es tradición, el Pontífice acude a Santa María la Mayor para rezar ante la imagen de la Salus Populis Romani (Protectora del Pueblo Romano), antes y después de sus viajes internacionales.
El Santo Padre, que ha definido este viaje como “una peregrinación apostólica”, salió de la capital italiana el pasado domingo 24 de julio rumbo al aeropuerto internacional de Edmonton, Canadá.
Durante los 5 días de viaje, el Papa Francisco se encontró con diferentes poblaciones indígenas del país, quienes han tenido un papel muy importante en la visita del Papa.
La primera etapa de su viaje se desarrolló en Edmonton, desde donde presidió la Santa Misa en el estadio “Commonwealth Stadium” y donde participó en la peregrinación al lago de Santa Ana.
El miércoles 27 de julio se trasladó a Quebec, donde se reunió con diferentes autoridades del país, además de con otros representantes de las Poblaciones Indígenas y con el Cuerpo Diplomático.
Desde Quebec presidió una Misa en el santuario Nacional de Sainte Anne Beaupré y tuvo un encuentro con religiosos del lugar en la Catedral de Notre Dame.
Posteriormente, el viernes 29 de julio, mantuvo un encuentro privado con los miembros de la Compañía de Jesús en el Arzobispado de Quebec y un encuentro con delegaciones indígenas.
Su tercera parada del viaje fue en Iqaluit, donde mantuvo un encuentro privado con algunos alumnos de las ex escuelas residenciales en la Escuela Primaria de Iqaluit.
Más tarde se reunió con los jóvenes y con los ancianos en la plaza de la escuela antes de emprender rumbo a Roma tras la ceremonia de despedida.
” Fuentes www.aciprensa.com ”