El panorama de la aviación comercial será muy diferente en un futuro no muy lejano, como demuestran las múltiples propuestas técnicas y comerciales que están apareciendo en los últimos años para electrificar el sector. Desde pequeños taxis aéreos eléctricos de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) hasta grandes aeronaves propulsadas por sistemas de propulsión no convencionales o combustibles alternativos la revolución de la aeronáutica promete ser tan interesante como la de los coches eléctricos. En este contexto, el Celera 500L es uno de los aviones eléctricos más innovadores. Promete un rendimiento notable, al estar alimentado solo por hidrógeno y junto a una gran capacidad para pasajeros y carga.
El Celera 500L es fruto de una colaboración entre ZeroAvia y Otto Aviation. El primero es un experto en motores eléctricos de hidrógeno mientras que el segundo ha diseñado un nuevo fuselaje que parece una bala o un torpedo, capaz de ofrecer un alcance y una velocidad impresionantes. Al agregarle el tren motriz ZeroAvia, podrá ofrecer ese mismo rendimiento con cero emisiones, lo cual tiene mucho sentido en la nueva etapa de la aviación comercial.
La principal innovación introducida por Otto Aviation es un diseño basado en el flujo laminar (niveles uniformes de flujo de aire distribuido en capas) que reducen su resistencia aerodinámica. La relación largo-ancho de la aeronave optimiza este flujo lo que da como resultado una reducción de la resistencia aerodinámica de más del 50 %, en comparación con otras aeronaves del mismo tamaño. Esto permite una autonomía que alcanza los viajes transcontinentales y una velocidad de crucero de más de 740 km/h con una mayor capacidad de pasajeros y carga
Aunque el avión de Otto Aviation fue diseñado bajo un planteamiento de ahorro de flamable, al añadir un sistema de propulsión eléctrico de hidrógeno como el de ZeroAvia podrá operar con cero emisiones. Ambas compañías se centran ahora en la integración del tren motriz ZA600 en el Celera 500L.
ZeroAvia desarrolló este motor de 600 kW como parte del proyecto HyFlyer II, respaldado por el gobierno británico con la intención de integrarlo en 2024 en un avión de pasajeros capaz de recorrer 800 kilómetros. Cómo bancos de prueba, Zero Avia utilizará dos aviones Dornier 228, uno en el Reino Unido y uno en California, donde actualmente están siendo equipados con este tren motriz eléctrico de hidrógeno.
El uso de hidrógeno en lugar de flamable convencional le quitará al Celera 500L parte de su autonomía aunque continuará alcanzando las 1.000 millas náuticas (1.852 kilómetros) que sigue siendo una cifra impresionante para un avión de pasajeros que utiliza un sistema de propulsión alternativo.
El diseño inusual del avión ofrece suficiente espacio en el fuselaje para almacenar grandes volúmenes de hidrógeno, según ZeroAvia. A medida que aumenta la disponibilidad de hidrógeno, también se espera que Celera 500L sea más rentable en comparación con los modelos convencionales. El objetivo ultimate de ZeroAvia es operar con aviones de hidrógeno con capacidades de entre 40 y 80 asientos en 2026.
” Fuentes www.hibridosyelectricos.com ”